Youtubers, MCNs y pantallas: radiografía del futuro del audiovisual
Los youtubers son el centro de una revolución en el consumo y producción de contenidos audiovisuales de la que todos quieren sacar tajada.
Una revolución profunda del mundo audiovisual
Más allá de nuevas profesiones o empresas que quieren sacar tajada, lo que significa el fenómeno youtuber es una revolución profunda del mundo audiovisual y de la creación, distribución y consumo de contenidos. “Lo que atrae de Youtube es que ofrece lo contrario a aquello que cansa de la televisión: horarios fijos, poca variedad, mucha publicidad, mucha autocensura y, en general, la sensación de que te están tratando mal como espectador todo el rato”, reflexiona Roc Massaguer, outconsumer en Youtube.
Pensar en un futuro en el que las plataformas tipo Youtube ganan la partida a la televisión tradicional es fácil, aunque al final todos apuestan por que veremos un modelo de convivencia. Bastian Manintveld opina que de momento estamos “en un proceso de transición, sobre todo en relación a la inversión publicitaria”, pero no cree que la televisión tradicional vaya a morir. “Simplemente disminuirá su hegemonía y se especializará en un tipo de contenidos”, dice, y cita la comparación con cómo “la televisión no mató a la radio o al cine”.
Lo que sí tendrá que ser distinta es la forma de entender cómo funcionan los formatos audiovisuales y de contenidos. Silvia Velasco, de Animal Maker, asegura que la revolución es profunda y lo cambia todo: “los códigos de comunicación (se consumen vídeos más cortos, espontáneos e inmediatos), los prescriptores (la mayoría de los Youtubers son personas anónimas para el gran mercado audiovisual), la capacidad de interactuar con la audiencia…”. En Animal Maker, dice, lo ven como “un cambio social en la forma de consumir contenidos y que no cesará”.
¿Dónde deja esto a los canales de televisión tradicional? Intentando sumarse al fenómeno Youtube a toda costa. Este mismo mes Comedy Central estrenó su nuevo programa “Yutubers”, en el que cuentan con tres youtubers, Sr. Cheeto, Mangel y Elvisa, entre su elenco de presentadores. La estrategia es fácil de adivinar: la esperanza de que los youtubers de éxito que dan el salto a la televisión arrastren con ellos a los seguidores de su canal, haciendo que las audiencias vuelvan a tocar puntos que hacía mucho que no se veían. Fiesta Suprema, de La2, es otro ejemplo de esto.
Hay una cosa que está clara: ser youtuber ya no es solo limitarse a subir vídeos a un canal y puede verse como una profesión de pleno derecho. “En todo el mundo hay más de un millón de canales que están generando beneficios económicos para sus dueños”, explica Virginia Wassmann, de Youtube España. “Hablamos, en general, de personas muy creativas que dedican 12-15 horas al día: piensan el vídeo, lo graban, lo editan, lo suben, lo “mueven” en redes sociales, contestan a sus fans… eso es una profesión”.