Ya se han descargado más de 100 millones de eSIM

Las tarjetas eSIM se han convertido en una tecnología en auge en la industria de las comunicaciones móviles. La eSIM es una pequeña tarjeta que se encuentra instalada de forma permanente en los dispositivos móviles como un chip. A través de ella se pueden activar contratos de comunicaciones móviles de forma rápida y sencilla. Además permite varios contratos a la vez, lo que resulta muy útil para personas que utilizan su móvil tanto para fines particulares como profesionales.

Según Philipp Schulte, responsable de Conectividad e IoT de G+D, la tarjeta SIM convencional de plástico será reemplazada en el futuro por la eSIM, que es más respetuosa con el medio ambiente y se convertirá en el nuevo estándar. Además, las eSIMs también contribuyen a la sostenibilidad y a la reducción de emisiones de CO2 al no requerir el uso de plástico, ni embalaje ni transporte para su entrega.

La SIM que se descarga

El proceso para activar una eSIM es muy sencillo. El usuario descarga su perfil SIM específico del proveedor de la red móvil directamente en ella. De esta forma el proceso de activación es más rápido y fácil que con la tarjeta SIM convencional.

Las ventajas de la eSIM son numerosas y significativas. Algunas de las más destacadas son: la comodidad de poder activar contratos de comunicaciones móviles desde el propio dispositivo, lo que permite prescindir de acudir a una tienda física; la posibilidad de tener varios contratos a la vez, con lo que resulta muy útil para personas que usan el móvil tanto para fines particulares como profesionales; y la contribución a la sostenibilidad y reducción de emisiones de CO2.

G+D, una de las empresas líderes en la fabricación de tarjetas eSIM, ya ha gestionado más de 100 millones de descargas de eSIM de usuarios a través de su plataforma, y prevé que todos los dispositivos móviles integren este tipo de tarjeta en poco tiempo, tal como ya ha sucedido con los nuevos iPhone 14 de Apple.