De momento exteriormente a pesar de ser más alargado es mucho más fino, 123,8 x 58,6 x 7,6 mm y 112 gramos de peso. Esto supone el mismo ancho, 8,6 mm más de largo, 1,7 menos de espesor y 28 gramos menos que el iPhone 4S, una mejora realmente sustancial.
La nueva pantalla de 4″ mantiene casi la misma densidad de pixels (326 frente a 330) con una resolución de 640 x 1136. Una resolución que comparada con la del resto de nuevos smartphones se queda atrás, no llega al “nuevo estándar” de 720p y destruye una de las grandes ventajas que tenía los iPhones para los desarrolladores al no tener que luchar con múltiples resoluciones.
Aún así el paso a las 4″ era ya necesario y manteniendo el mismo ancho han encontrado una manera lo menos devastadora posible a la esencia del iPhone. Bien hecho por Apple aunque no haber llegado a los 720p les puede costar caro al tener que llegar a esta resolución en un futuro.
En cuanto al procesador nos encontramos ante un A6, mucho más pequeño y más eficiente. Apple asegura que gráficamente es 2 veces más potente que el A5X, que a su vez teóricamente era 2 veces más potente que el A5. Como siempre Apple no ha dado detalles, pero todo indica que usa dos núcleos ARM Cortex A15 y una GPU tetranuclear.
En cuanto al nuevo puerto Dock, que ahora se llamará Lighting, sinceramente tengo que decir que es decepcionante. Vale, permite conectarlo en cualquier sentido, pero sigue sin ser compatible con microUSB. Que además quieran cobrar 20 dólares por él, 30 por el adaptador y 40 por adaptador con cable, con el follón que va a suponer a usuarios y fabricantes, simplemente es una locura.
Tampoco veremos NFC ni microSD, Apple sigue empeñada en pasar de la universalidad y compatibilidad para arrastrar a sus usuarios a un mundo sólo Apple. Pero bueno, ya somos mayorcitos para saber que elegimos.
Han incluido LTE, por lo que las demandas de Samsung y HTC para acabar con él se verán en breve, y es compatible con todo tipo de estándares y frecuencias por todo el mundo, lo cual es fenomenal y en eso deberían sentirse orgullosos.
La cámara trasera se mantiene en 8MP, aunque ahora le añaden iluminación trasera, un filtro híbrido de infrarrojos y apertura f/2,4. Todo eso queda bastante atrás de la apertura f/2,0 de los nuevos HTC y el Lumia 920, pero en Apple aseguran que su cámara es mucho mejor que la del anterior iPhone 4S.
El nuevo sensor para capturar imágenes es mucho más rápido, 40% según lo que dicen, lo que permitirá grabación de vídeo y toma de fotos simultánea, reconocimiento facial en vídeo y fotos, creación de panoramas de 240º de 28MP, aunque esto también será posible en el 4S.
El audio mejora gracias a que incorpora 3 micrófonos: frontal, trasero e inferior; que permiten una mejor cancelación del ruido. Los altavoces también mejoran gracias a usar 5 transductores en lugar de 3 y, al parecer, las llamadas tendrán mejor calidad usando “wideband audio” que supondría usar un mayor espectro en las llamadas si el operador lo permite.
Seguirán las 3 opciones de 16GB, 32GB y 64GB, manteniendo los precios que tenía hasta ahora el iPhone 4S, y aunque llegará a varios países el 21 de septiembre, a España y Latinoamérica tardará al menos hasta el 28.
¿Qué opináis, Apple ha sabido cumplir con las expectativas o ha decepcionado al no haber ofrecido suficientes mejoras y novedades con respecto al resto?
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