Y si tuvieran todos los móviles el mismo cargador
Si ocurriera, los usuarios no tendrían que ir como alma en pena por la oficina buscando un cargador compatible o esperar hasta encontrarse con alguien que comparta gustos tecnológicos. El Parlamento europeo ha dado el primer paso para que ocurra.
Aunque todavía debe ser validada formalmente por el Consejo, el Parlamento Europeo ha aprobado, por 550 votos a favor, 12 en contra y 8 abstenciones, una propuesta para que todos los móviles vendidos en la UE adopten el mismo cargador.
“Me alegra que estemos de acuerdo en la introducción de un cargador común. De esta manera, respondemos a los intereses de los consumidores y también a los del medio ambiente. Se va a poner fin a la aglomeración de cargadores y a 51.000 toneladas anuales de residuos”, ha asegurado la ponente de la propuesta, Barbara Weiler , del partido alemán S&D.
Al margen de que se simplificaría su uso y se reducirían costes y residuos, la nueva legislación, que también afecta a mandos a distancia para coches y módems, pretende responder al aumento del número y a la variedad de los dispositivos radioeléctricos y asegurar que no interfieren entre ellos, además de respetar los requisitos esenciales de salud y seguridad.
Los Estados miembros tendrán dos años para trasponer las normas a sus leyes nacionales y los fabricantes dispondrán de un año más para adaptarse a las nuevas disposiciones. Así, el cargador universal será una realidad en 2017.
Aunque la normativa establece que los cargadores comunes van a ser un requisito esencial para los equipos radioeléctricos, será la Comisión Europea la que determine los tipos de aparatos que deberán cumplir esa condición. Tras la información proporcionada por los Estados miembros y después de una estricta evaluación, la Comisión podrá identificar las categorías de equipos que tendrán que ser registradas antes de ser introducidas en el mercado. Estados Unidos ya dispone de una base de datos similar.
De acuerdo con la nota difundida, el objetivo de todo esto es “garantizar un nivel alto de protección de los consumidores y el uso más eficaz del espectro radioeléctrico, la vigilancia del mercado y un mayor grado de coherencia con el nuevo marco legislativo”.