Waymo podría valorarse en 70.000 millones de dólares como spin-off de Alphabet
Analistas de Morgan Stanley exploran la posibilidad de un spin-off de la división de vehículos autónomos.
No ha pasado ni medio año desde que Google desvelase Waymo, su unidad centrada en los coches autodirigidos, y ya hay quien la posiciona a la cabeza de los potenciales negocios de Alphabet. Dos analistas de la firma financiera Morgan Stanley, Brian Nowak y Adam Jonas, han escrito un informe en el que lo revelan como la división de la compañía que más posibilidades tiene de convertirse en una spin-off.
El análisis es, desde luego, para tener en cuenta. Según explican Nowak y Jonas y recoge Forbes, Waymo podría alcanzar un valor de 70.000 millones de dólares, de independizarse de Waymo y establecerse como una compañía autónoma. En esta alta valoración tendría un papel importante el acuerdo que Waymo firmaba recientemente con la startup de ridehailing Lyft para colaborar en el desarrollo de vehículos autónomos.
Entre los factores por los que Alphabet podría optar por una spin-off para Waymo, los analistas destacan tres. El primero es, cómo no, su valoración económica, que supone una nueva oportunidad de crecimiento para el gigante. Además, ha superado con éxito el proceso de independizarse de su incubador, Google X, y funciona por su propia cuenta.
Por último, y como uno de los factores más importantes, el desarrollo de tecnología autónoma conlleva una serie de desafíos legales y riesgos a nivel de regulación a los que Google no estaría dispuesto a exponerse directamente. .
Si el negocio de vehículos autónomos pasa por una spin-off, se plantea un interesante escenario para la firma y su competencia, tanto en el sector de la autoconducción como por en las plataformas de viajes. Waymo se constituiría como la empresa más fuerte, de confirmarse la valoración que estiman en Morgan Stanley: con sus 70.000 millones de dólares, pasaría holgadamente a Tesla y Uber, que se mueven alrededor de los 50.000 millones. Una atractiva posibilidad que sin duda no ha pasado desapercibida en Mountain View.