T-Mobile anunció el pasado jueves que está haciendo las primeras pruebas de su red VoLTE en la ciudad de Seattle, aunque la irá extendiendo a gran parte del país a lo largo del año. Los primeros dispositivos que aprovecharán dicha tecnología serán el LG T Flex, el Samsung Galaxy Note 3 y el Samsung Galaxy Light, como recoge Los Angeles Times.
Ha sido el primer operador estadounidense en presentar esta tecnología, adelantándose tan sólo en un día al lanzamiento de AT & T, que presentó su red ayer mismo. En su caso, las primeras pruebas serán en Illinois, Indiana, Minessotta y Wisconsin. El primer terminal que podrá usar esta red será el Samsung Galaxy S4 Mini. El otro gigante de las telecomunicaciones nortamericano, Verizon, se ha quedado algo más rezagado, puesto que su VoLTE no llegará hasta finales de año.
¿Por qué se lanzan las compañías a esta carrera? ¿Qué ofrecerá al consumidor? VoLTE permite realizar llamadas de voz a través del estándar LTE. A diferencia de los protocolos GSM y CDMA, creados para la transmisión de voz pero que posteriormente se adaptaron para portar datos, VoLTE toma el camino inverso, convirtiendo la conversación en datos.
Aunque los datos se transmiten a través de la tecnología IP del operador, sirve para hacer llamadas ‘normales’, tal y como lo hacemos mediante GSM o CDMA. Es decir, el principio es similar al de las llamadas VoIP que ofrecen aplicaciones como Skype o Viber. La diferencia es que quien controla la infraestructura es el operador, pudiendo competir con estas apps de terceros y dejarlas ‘fuera de juego’.
Esto podría suponer un cambio radical en las llamadas, similar al que han sufrido los SMS con la llegada de Whatsapp. Quizá cambie la manera de pagar las llamadas de voz, pasando a pagar por volumen de datos en vez de hacerlo por minutos. O tal vez las operadoras mejoren las tarifas de sus planes de voz.
En cuanto a las ventajas para el consumidor final, la principal es que la conversión de las llamadas en datos permite llamadas de más calidad, con sonido de más claro y menor ruido de fondo. Es la denominada ‘Voz HD’. Además, esta tecnología consigue que el establecimiento de llamada sea hasta 20 veces más rápido que sobre una red 3G. Asimismo, ofrece otras ventajas como pasar de llamada a videollamada mientras estamos hablando, sin contar la llamada y con un solo clic.
Esta tecnología permitirá descongestionar las redes GSM y CDMA, ya casi completamente saturadas por al crecimiento exponencial del volumen de datos transmitido. VoLTE llegará a Japón en junio, de la mano de NTT Docomo. Alemania será el primer país en recibir la VoLTE en Europa, mientras que Brasil planea liderar su implantación en Sudamérica.
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