Nueve meses de gestación es lo que ha tardado Vodafone España en diseñar el paquete de servicios convergentes que responda al desafío planteado por Movistar Fusión. Con la adquisición de Ono en 2013 por un montante de 7.200 millones de euros, Vodafone resolvía de un plumazo su carencia de una red propia de cable HFC en toda la geografía española. Ahora, unida a su extensa red de última generación LTE (con una cobertura del 80% y, según un estudio de OpenSignal, la de más alta velocidad media de las analizadas en el mundo, 25,2 Mbps frente a los 15, 14 y 11 Mbps de sus competidores nacionales), le permite sumar 4G y fibra óptica para dar tanto banda ancha fija como móvil sobre la que construir una nueva generación de servicios, empezando por la televisión inteligente. Y poder estrujar el tarifario, los arpus y los ampus, y cualquier otro componente que trasvase ingresos y márgenes del ebitda al cash flow según convenga, al poder trabajar con mayor soberanía sobre todos los frentes.
Para este paquete se ha elegido el nombre de One. Parece obvio, one por “todo-en-uno”, y one por Vodaf-one, “pero lo cierto es que se sometió a un estudio muy profundo de naming, de una lista larga de cien nombres, se sacó una corta con quince, y de esta una terna que se sometió a diversos focus groups”, explica Antonio Coimbra, CEO de Vodafone España. “Más todo el trabajo previo de integración de equipos y sistemas, y el posterior del grafismo del logo. Eliminar toda la complejidad tecnológica, los clientes no compran siglas, compran servicio y velocidad real. Por eso queríamos una oferta fácil de entender, y muy flexible: que fuera el propio cliente y no el operador el que se la pudiera componer de acuerdo a sus necesidades y presupuesto”.
Así, Vodafone One descansa sobre cuatro pilares básicos: el servicio de voz fija de serie, con llamadas ilimitadas entre fijos, y 60 minutos a cualquier operador móvil nacional. El servicio de telefonía móvil 4G disponible en doble combinación de llamadas y datos: con paquetes de 200 minutos con 800 MB o 1 GB, o de llamadas ilimitadas con 2 o 4 GB. Y el servicio de banda ancha, con cuatro velocidades principales garantizadas, más dos en los extremos: 30, 60 120 o 200 Mbps de bajada (y un 10% de subida en cada tramo), más una por encima de 500 Mbps para empresas, y una por debajo de los 30 Mbps a través de VDSL en aquellos territorios fuera de la huella de Ono. Opcionalmente, a las diversas combinaciones se puede añadir el servicio de Vodafone TV, dividida en tres versiones: esencial (70 canales), extra (100) y total (120).
En función de las diversas combinaciones posibles, los precios van de los 43 euros mensuales IVA incluido en la configuración más básica, hasta los 83 euros en la más completa. Estos precios se mantendrán durante toda la fase de lanzamiento, del 20 de abril al 30 de junio, a todos los clientes “pioneros”, procedentes bien de su base en Ono y Vodafone, como nuevos. A esta oferta se le añade el paquete esencial o extra de Vodafone TV de manera gratuita hasta el 31 de diciembre. Más la disposición de WiFi a nivel nacional sin coste adicional a través del millón de hotspots que dispone Vodafone heredados de la red de Ono (hasta 5 GB mensuales), y también internacional gracias a un acuerdo con FON (hasta media hora diaria).
Con Vodafone One también es posible asociar hasta cuatro terminales móviles a la principal, entre 9 y 34 euros/mes por línea según el volumen de datos dedicados deseado, o de 17 euros/mes entre todas si se quieren compartir los datos disponibles. En este caso, el titular puede desde restringir y distribuir el consumo a cada número de manera específica, o abrirlo sin limitaciones entre todo el grupo hasta que se agote. Cada 200 MB extras que se deseen contratar se pagan a 2 euros con el servicio +Megas.
Otros servicios de serie de valor añadido que conlleva la contratación de Vodafone One, son el de BackUp+, con 25 GB de espacio en la nube a través de Dropbox durante uno o dos años, según la modalidad adoptada. Igualmente, se posibilita pagar con el móvil a través de Vodafone Wallet, que ya funciona en los autobuses de Logroño y Valencia, así como en 400.000 establecimientos comerciales de España. A partir de junio, estará disponible SecureNet para proteger los terminales de virus y webs no seguras, mientras que Call+ enriquecerá la experiencia de llamadas gracias a tecnología VoLTE con contenidos multimedia adjuntables (fotos, vídeos, mapas, contactos…) sin coste añadido para el receptor. Igualmente, Voz HD ya está disponible en toda la red de 3G y 4G, lo que incrementa notablemente la calidad de las llamadas.
En el caso concreto de la televisión, se basa en los servicios de la plataforma TiVo, a la que han adaptado su interfaz con un look and feel específico, y una oferta de canales temáticos, 52 de ellos en HD, a los que se puede añadir otras cadenas de pago como Canal+ para la Liga de fútbol, u otros premium hoy pendientes de una resolución de Competencia como la F1 o el MotoGP. Se pueden grabar hasta tres canales simultáneamente, disponiendo de 500 GB de espacio de almacenamiento, para confeccionar una parrilla a la carta. Por supuesto, se dispone de funcionalidades avanzadas como detener y retroceder incluso en contenidos en vivo, con la opción extra de disponer de distintos ángulos de visión, o la de compartir en hasta cinco dispositivos simultáneos, además de vídeo bajo demanda con más de 3.000 títulos entre películas y temporadas completas de series, o acceso directo a YouTube.
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