Vodafone lanza la octava generación de terminales de marca blanca

Vodafone anuncia la disponibilidad inmediata de la nueva familia Smart 8 compuesta por tres smartphones y una tablet con los que esperan mantener el pulso con el resto de operadoras (en especial Orange) que también apuestan por la marca blanca. Una tarta del mercado que no hay que despreciar y que les reporta un 14% de los ingresos en este segmento, además de apalancar la venta de planes combinados.

“Estamos satisfechos con la creación de nuestros propios equipos, con nuestros propios diseños, y con todo lo que consideramos que deben llevar para democratizar las tendencias punteras del mercado en la mejor relación calidad precio sin renunciar a nada”, decía Nuno Taveira, director de la Unidad de Negocio de Terminales de Vodafone España. “En especial, llevar el 4G a la gama media y de entrada”.

En 2008 se lanzaba de manera tímida el primer teléfono con marca Vodafone, que dos años después ya se completaba con una familia competa. Desde entonces, según su portavoz, se han vendido más de 100 millones de unidades en todo el mundo, de ellos casi 2 millones en España, en concreto más de 650.000 desde 2014. “Eso da una cifra de un teléfono cada tres segundos. Pensamos con esta octava generación seguir manteniendo estables la cuota de mercado y llegar a los 22 millones de teléfonos vendidos. Quizás sean un poco menos en volumen, pero como los que vendemos son más caros, al final tendremos más ingresos”, comentaba Taveira. “Actualmente tenemos la segunda posición, en algunas regiones somos incluso primeros. Mantener ese 14-15% con nuestra marca creemos que es una proporción sana, también tenemos que vender Samsungs y Apples”.

Leyendo entre líneas, donde se dice estable quizás habría que interpretar “plano”, y así piensa que será los próximos dos años. Los arpus y los chunks cada vez están disputados de mantener, y este tipo de terminales pueden servir también para, además de fidelizar a clientes que vengan de One (el 90% de los terminales de marca propia se asocian a los planes combinados, y llevan gimmicks como el chateo sin límite, el roaming por Europa y EEUU o el control parental), lograr convencer a los más díscolos que van por libre: “creemos que el número de terminales libres que se venden en tienda aumentarán con el tiempo”, asegura Taveira.

4G por menos de 100 euros

De ahí los precios atractivos de verdadera marca blanca. El nuevo Smart V8 con 4G+ alcanza velocidades de bajada de 300 Mbps, con un procesador de ocho núcleos y una batería de 3.000 mAh, pantalla FHD de alta definición de 5,5”, lector de huella y cámara trasera y delantera de 16 Mpx/8 Mpx, todo ello con un atractivo diseño en Cold Metal que ha recibido el premio IF de 2017: precio, 192 euros IVA incluido asociado a un plan One M o 254 euros en prepago.

El hermano pequeño, el Smart N8, baja un peldaño en todas las características (4G a 150 Mbps, cuatro núcleos, 5” HD IPS, 2.400 mAh. 13/5 Mpx), aunque mantiene el sensor de huella digital y un diseño de carcasa en Graphite también premiado en IF 2017: precio, 112 euros con un plan One M o 132 euros libre.

Finalmente, el más económico es el Smart E8, otro peldaño más abajo, pero que por 72 euros en un plan convergente (o 83 euros libre) mantiene 4G, cuatro núcleos, 5” FWGA LCD, 2.200 mAh y 5/2 Mpx. Por su parte, la Smart Tab N8 con pantalla de 10” aún no tiene definido un precio, “pero será muy competitivo y saldrá en julio”.

Vodafone vuelve a confiar la producción a los mismos fabricantes, reservando a TCL (Alcatel) los modelos con procesador Qualcomm Snapdragon (V8 y E8) y a ZTE los que van con chips Mediatek (N8 y Tab N8).

Preguntado Taveira si Vodafone tiene intención de aumentar la gama de productos marca blanca con wearables o televisores 4K para sus ofertas convergentes, ni afirmó ni desmintió: “estaremos allí donde podamos aportar valor al cliente con tecnologías innovadoras y de calidad, con diseños propios y con algo especial y diferenciador; de momento estamos en móviles y tabletas, no puedo decir más”.