Viviendo con la incertidumbre
Los empleados de empresas informáticas tienen que acostumbrarse a un sector en el que la compraventa de empresas y los cambios en bolsa están a la orden del día.
Día tras día leemos noticias de empresas de informática que se hunden, o que se compran y se venden. Unas veces es una gran corporación que compra a otra y todo queda más o menos igual. Un puñado de despidos, a lo sumo. Otras veces se compra para destruir, para acabar con la competencia. O puede ser una unión a partes iguales, que permita a todos deshacerse de lo que no interesa. Nosotros, sin ir más lejos, pasamos un puñado de meses en venta, y quizá aún sigamos igual, nunca se sabe. Leer una noticia sobre una compraventa no impresiona demasiado, especialmente si en la página de al lado hay algo más fuerte, como imágenes de un cadáver o de un iPod. ¿Pero qué pasa con los empleados, que pueden ser ?sólo? cientos o pueden ser miles? Nos falta un estudio psicológico de la repercusión de estas noticias en su estado de ánimo y, por tanto, en su rendimiento. No estamos preparados para afrontar la incertidumbre de estar en venta. En los departamentos de recursos humanos son demasiado pocos para plantearse cosas así. Necesitamos un John Nash que nos salve de la incertidumbre. Alguien que descubra la manera de que todos saquemos provecho. Cuando se anuncia que estás en venta lo primero que te preguntas es si es que unos no te quieren nada o es que otros te quieren mucho. Después de un tiempo te convences de que cómo te va a querer mucho alguien que no te conoce y, al mismo tiempo, cómo te va a querer el que te conoce. Empiezas a dudar de ti mismo, como un enamorado despechado. Cuanto más dure la incertidumbre de saber quién se quedará contigo, mayor será tu propia falta de fe. Mejor sería que todo pasara bajo la moqueta, porque nadie duda de que allí hay vida, y un día te dijeran: ?No, hombre, ya no somos HP. Ahora somos Dell, aunque en medio fuimos Fujitsu-Siemens.? No tendrías ni que decírselo a tu mujer, que con el paso de los años tendría sus dudas sobre dónde trabajas. ?¿No estás en Microsoft?? ?No? Pero dale tiempo al tiempo?. Mientras tanto, tendremos que acostumbrarnos a la incertidumbre.