Este violín es como algún lector de Gizmodo, que se toca a sí mismo: el Virtuoso incluye un altavoz Acoustic de 40 vatios y un controlador MIDI por si quieres acompañamiento de piano. Eso sí, el sonido del violín es real, nada de samples ni guarrerías electrónicas por el estilo. Y por los 13.500 euros que cuesta, ya le vale.