Los dispositivos móviles le dan una vuelta de tuerca a la industria de los videojuegos

Del móvil al salón

Otro fenómeno que demuestra lo pacífica que está siendo la coexistencia entre juegos para móviles y para ordenadores y videoconsolas es el intercambio de papeles que podría producirse en el corto plazo. En este sentido, ya se están produciendo los primeros movimientos para que el sistema operativo Android llegue a las videoconsolas de salón.

Kickstarter, una firma de crowdfunding especializada en captar financiación para iniciativas de índole tecnológica, ha permitido el nacimiento de los proyectos Ouya y Game Stick. El respaldo económico obtenido en ambos casos ha superado las expectativas iniciales.

Los dos dispositivos cuestan menos de 100 dólares y están basados en Android. Pero mientras Ouya es similar a lo que entendemos por una videoconsola de toda la vida, Game Stick tiene el tamaño de un llavero USB y se conecta a la tele a través del puerto HDMI.

Desde Ubisoft explican que “proyectos como Ouya o Escudo de Nvidia han suscitado un gran interés”. Asimismo, añaden, “siempre es bueno contar con nuevos dispositivos, ya que ofrecen a los desarrolladores la posibilidad de ser más creativos”. En la misma línea apunta Óscar del Moral, de Koch Media, quien sostiene que “lo que al final desean las empresas desarrolladoras es generar ingresos con sus propiedades intelectuales, y para ello buscarán nuevas plataformas”.

Visto desde la óptica del usuario, el éxito de estos nuevos dispositivos dependerá del “tipo de juegos que ofrezcan, así como de la posibilidad o no de jugar online, de su capacidad gráfica y, sobre todo, del precio”, explica Pablo Avilés, presidente de Asupiva. En cualquier caso, añade, “las compañías del sector van a tener que estar muy pendientes de la evolución de los dispositivos que incluyan estos sistemas operativos, y que ya están dando lugar a una nueva generación de consolas”.