Las universidades potencian a los emprendedores, según un estudio

Una investigación realizada en distintos países europeos destaca el impacto significativo de la educación superior en las aspiraciones emprendedoras.

Un estudio realizado por la Universidad de Brunel en Londres ha tratado de comprobar cómo la vocación emprendedora surge dentro de las universidades europeas.

Aunque las universidades son ampliamente reconocidas por formar futuros profesionales, líderes y académicos, este estudio busca medir en qué medida encienden la llama del emprendimiento en su alumnado.

Para la elaboración del trabajo, publicado en Studies in Higher Education, se encuestó a 2.553 estudiantes de Reino Unido, Italia, España y Polonia.

Estos universitarios, especializados en campos diversos como gestión empresarial, ciencias sociales, política e ingeniería, fueron sometidos a un cuestionario basado en la Teoría de la Conducta Planificada (TPB, por sus siglas en inglés). Esta teoría es fundamental para explicar los procesos mentales que influyen en las intenciones individuales de emprender dentro del contexto educativo.

El cuestionario basado en la TPB examinó tres indicadores cruciales: la actitud, las normas subjetivas y el control conductual percibido. Además, exploró las habilidades que los estudiantes desarrollan durante su tiempo en la universidad, como el pensamiento innovador, la comunicación y el liderazgo. Todas estas habilidades, en teoría, pueden amplificar sus intenciones de emprender.

“Al incorporar las habilidades generales que las universidades aspiran a impartir a los estudiantes, realizamos una prueba directa de la eficacia de la educación universitaria para inspirar a los estudiantes a convertirse en emprendedores”, ha comentado el autor principal del estudio Grigorios Theodosopoulos.

Los resultados de la encuesta revelaron que las habilidades adquiridas en la universidad tenían el efecto positivo más pronunciado en las intenciones emprendedoras de un estudiante, superando a menudo la influencia de los tres indicadores de la TPB.

En términos de los indicadores de la TPB, la actitud de los estudiantes hacia el emprendimiento emergió como el factor más influyente en la formación de su convicción e intención emprendedora.

El control conductual percibido tuvo el mayor impacto en la intención emprendedora entre los estudiantes del Reino Unido, mientras que las normas sociales también jugaron un papel significativo en todas las regiones.

El poder de las redes para emprender

Theodosopoulos atribuye el efecto positivo de las normas sociales a la influencia de la red cercana de un estudiante, que incluye familia, amigos, mentores universitarios y compañeros de clase.

“El impacto de las habilidades obtenidas en la universidad es notable y supera en magnitud todas las construcciones clásicas de la teoría de la conducta percibida”, subraya el investigador.

Incluso en programas de estudio que carecen de formación explícita en emprendimiento, el informe sugiere que los profesores y el personal de apoyo que fomentan la empleabilidad, habilidades sociales, liderazgo, creatividad y pensamiento crítico pueden mejorar significativamente las intenciones emprendedoras de un estudiante.

“Un entorno universitario que apoya y alienta a los estudiantes a desarrollar conocimientos específicos, competencia técnica, entusiasmo, autoconfianza y conciencia empresarial puede fomentar mayores intenciones emprendedoras”, afirma Theodosopoulos.

“Los resultados muestran que el entorno universitario crea un sólido ecosistema emprendedor, facilitando la transición de los estudiantes hacia el emprendimiento”, concluye.