Una ola de tormentas eléctricas ha azotado este fin de semana el noreste de los Estados Unidos. Gran parte de la población de los Estados de Virginia, Ohio o Indiana se quedaba a oscuras durante más de un día.
El centro de datos East-1, en el que opera Amazon Web Services también se vio afectado. Las consecuencias fueron inmediatas: hubo interrupciones en los servicios ofrecidos por Instagram, Pinterest y Netflix, que se alojan en esa nube.
La aplicación de fotografía fue en seguida trending topic mundial impulsado por los tweets de miles de personas que echaban de menos el servicio, lo que también motivó un torrente de punzantes tuits que ironizaban con la desesperación de quienes no podían utilizar la app.
Ya en agosto de 2011, una tormenta eléctrica en Dubín dejaba a miles de usuarios sin acceso a páginas como PayPal, Filmin o Menéame. Otra tormenta, esta vez de críticas, cayó sobre la empresa de Jeff Bezos.
En abril de ese mismo año, servicios como Foursquare, Formspring o Reddit se veían también afectados por caídas intermitentes. Esta vez la cída no se debió a ningún fenómeno meteorológico agresivo. Se trató de un fallo técnico.
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