Una “puntocom” desploma la Bolsa de Tokio

Las sospechas de que el vertiginoso crecimiento del grupo de Internet Livedoor fue fruto de prácticas ilícitas han sacudido el mundo financiero nipón.

Cuando hace ya cinco años de la burbuja tecnológica, los inversores japoneses han vuelto a caer en la misma piedra. Las sospechas de que el vertiginoso crecimiento del grupo de Internet Livedoor fue fruto de prácticas ilícitas han sacudido el mundo financiero nipón y provocado un espectacular desplome bursátil, del 2,8 por ciento, la mayor caída en lo que va de año.

El índice Nikkei se quedó en los 15.805,95 puntos, tras una racha bajista que afectó sobre todo a las empresas de informática y altas tecnologías.

La caída está directamente relacionada con una noticia que hoy acaparaba las portadas de los diversos medios locales: las autoridades sospechan de que las empresas del grupo Livedoor incurrieron en falsificaciones sistemáticas de información para manipular la fluctuación de sus títulos bursátiles.

Dentro de las primeras pruebas del caso, la edición digital del influyente diario económico “Nihon Keizai” citaba unos correos electrónicos en los que varios ejecutivos de una filial de Livedoor acordaban falsear la fecha de compra de una editorial.

Los mensajes entre los directivos de Livedoor y su filial Livedoor Marketing mostraron que el falso anuncio fue deliberado, y su propósito era lograr fuertes beneficios y la revalorización de sus títulos.

El presidente de Livedoor, Takafumi Horie, anunció este martes que llevará a cabo una investigación interna sobre las supuestas prácticas ilegales.

En una conferencia de prensa celebrada pocas horas después de que las autoridades terminaran el extenso registro de la sede de Livedoor, el empresario de 33 años prometió hacer públicos los resultados de la investigación.

Horie, conocido por sus agresivas operaciones financieras y su gusto por las camisetas de diseño y sus declaraciones ampulosas, descartó cualquier efecto negativo del escándalo en sus negocios. Sin embargo, aunque las acciones de Livedoor se cotizan en el mercado secundario Mothers de la bolsa de Tokio para nuevas empresas, el índice Nikkei registró hoy su peor descenso desde 2004.

Seis compañías del grupo Livedoor vieron cómo sus acciones eran vendidas y perdían 150.000 millones de yenes (1.250 millones de dólares) de su capital, según informó la agencia Kyodo.

Los detalles de la investigación oficial difundidos en medios nipones revelaron que ValueClick Japan, filial de Livedoor, violó la normativa bursátil vigente al falsificar testimonios relacionados con la absorción de otra empresa y tras manipular su contabilidad.