Una patente de Apple pone en apuros a los ultrabooks
La firma de Cupertino ha conseguido patentar el diseño general de su MacBook Air, lo que le permitirá luchar en los tribunales contra otros ordenadores portátiles ultraligeros similares.
Desde la presentación de los ultrabooks de Intel hace ahora más de un año, muchas han sido las voces que han criticado lo que consideran una copia directa del ordenador portátil Macbook Air y muchas otras las que los defienden como una evolución natural de la industria de ordenadores. Sin ir más lejos, HP ha tenido que salir al paso de las indirectas durante la presentación de su Eny Spectre XT explicando que “la vida está llena de similitudes”.
Pero ahora el desarrollo de futuros ordenadores ultraligeros, a medio camino entre los PC tradicionales y las modernas tabletas, podría complicarse un poco. Y es que el registro de propiedad intelectual estadounidense ha concedido una patente a Apple que cubre todo el diseño de su producto, desde su aspecto de cuña hasta sus características formas redondeadas.
El título en cuestión, D661,296, contiene una gran cantidad de dibujos que matizan los términos de la protección exigida en la descripción escrita. La firma de Cupertino ha decidido pasar de puntillas sobre detalles de menor importancia en el mundo de la movilidad, como el contorno trasero del MacBook Air, el sistema de bisagras o los puertos de conexión secundarios, para centrarse en el aspecto general del dispositivo, su forma de cuña y líneas sólidas.
Y es que “las líneas discontinuas proporcionan el contexto, pero no definen del todo lo que está patentado”, comentan desde The Verge, publicación que ha sacado a la luz la patente. “A la hora de determinar una infracción, los tribunales analizar si el dispositivo presuntamente infractor y la patente del diseño son muy similares en apariencia general desde el punto de vista de un observador común, excluyendo pequeñas diferencias”.
Esto implica que todo ordenador portátil con parte trasera o bisagras claramente diferentes pero inspirado en la línea estética del Air será susceptible de ser demandado por infringir su copyright. Para evitar denuncias, éstos tendrán que confíar a partir de este momento en modificaciones significativas en los ángulos, formas y proporciones de su obra.