Un tercio de los PC españoles aloja malware de alto riesgo

El Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (INTECO) acaba de publicar su informe anual sobre seguridad de la información y e-confianza de los hogares españoles, y lo hace con una conclusión rotunda: la aplicación de medidas de seguridad continúa siendo una tarea pendiente en buena parte del parque nformático nacional.

Por ejemplo, el 27,4% de los usuarios admite cometer prácticas de riesgo de forma consciente cuando usa Internet. La tercera parte de ellos descarga archivos sospechosos y casi dos de cada diez declara abrir páginas o enlaces que saben que no son seguros.

Como consecuencia de esta dejadez, el 68% de los encuestados por el INTECO dice recibir correos no deseados y bastantes menos, un 20%, haber sufrido problemas relacionados con virus informáticos, troyanos y otros tipos de malware. Eso es lo que admiten al ser preguntados directamente, pero las auditorías de seguridad desvelan que en realidad un 45% de los equipos domésticos aloja algún tipo de código malicioso y en 1 de cada 3 casos es malware de alto riesgo. Es decir, que la mitad de los españoles cuyos equipos están infectados por algún tipo de amenaza lo desconoce.

Con la popularización de las redes sociales, también se ha experimetando un aumento de las suplantaciones de identidad. Y en el caso de los menores preocupa que “su desconocimiento y buena fe pueda ser aprovechada para abusar de su confianza”, comentan los responsables del estudio.

De todos modos, cada vez más personas restringen el acceso a su información en Internet. A día de hoy sólo el 8,3% de los miembros de redes sociales mantienen su perfil accesible para cualquier persona, lo que supone la mitad que hace dos años.

Los programas antivirus continúan siendo las herramientas de seguridad que más confianza despiertan entre los usuarios, siendo utilizados por el 91,6% de ellos. También ha aumentado el porcentaje de gente que se preocupa por actualizar su sistema operativo y la aplicacioens de terceros, o que decide utilizar contraseñas y cortafuegos.

Eso sí, respecto a las reacciones ante problemas reales, 4 de cada 10 usuarios no modifican sus hábitos de conducta tras haber sufrido una incidencia. Sólo el 8,6% deja de realizar descargas en redes de intercambio de archivos, el 6,8% abandona el uso de software ilegal, el 5,4% se aleja del e-commerce y el 4,7% cesa las operaciones a través de la banca electrónica.

Éstos y otros datos pueden consultarse online en el susodicho “Estudio sobre la seguridad de la información y la e-confianza de los hogares españoles”.