Un portátil robado puede ocasionar pérdidas de 38.000 euros

Cuando un notebook se pierde o es robado, las compañías deben afrontar unos importantes gastos, ya no por el dispositivo en sí, sino por la información privada que contiene.

Intel ha proporcionado un estudio acerca del coste real que puede suponer a una empresa la pérdida o robo del portátil de algún empleado.

Este estudio ha sido encargado al Instituto Ponemon, que ha realizado un cálculo medio del precio que terminan pagando las compañías en estas circunstancias.

La cifra media se sitúa en los 50.000 dólares (38.314 euros), pero en casos extremos se podría llegar a perder del orden de 1 millón de dólares.

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Se ha llevado a cabo en base a 138 portátiles perdidos. Tal y como ha indicado George Thangadurai, director de planificación de estrategias y servicios antirrobo de Intel, “estamos contemplando una negativa tendencia en los portátiles robados, que cada vez está más extendida”.

El estudio muestra que aproximadamente 1 de cada 10 ordenadores portátiles es robado, de los cuales el 88% no han podido ser recuperados.

La solución a estos gastos adicionales pasa por la encriptación de los datos. Así, la diferencia entre un equipo robado que estaba encriptado y otro que no incorporaba ninguno de estos sistemas, ha sido de 20.000 dólares, cifra que podría ser incluso más alta en determinadas ocasiones, tal y como ha comunicado Larry Ponemon, presidente del Instituto Ponemon.

También señala que “la encriptación se encontraba en el portátil, pero no de forma correcta. El factor humano es, en este caso, fundamental, ya que el éxito en los procesos de encriptación requiere de una monitorización continua por parte de los usuarios”.

El precio que las compañías deben afrontar se aumenta según lo hace la posición del empleado en la compañía.

Efectivamente, estos costes no provienen de la adquisición de un nuevo dispositivo, sino de la información que se guarda en los portátiles, los datos críticos con los que trabajan en su día a día.

Para intentar reducir este tipo de gastos en las empresas, Intel propone su nuevo sistema de antirrobo implementado en la plataforma móvil Centrino Pro y basado en la desactivación completa del portátil en caso de robo para que no pueda ser usado por los delincuentes. Una vez recuperado, podría “volver a la vida” mediante una especie de antídoto.