Un año con Chrome
El navegador de Google cumple su primer año de vida posicionándose como un rival potencial en un mercado cada vez más competitivo.
El 2 de septiembre de 2008 Google anunció el lanzamiento de su navegador Chrome, el primer browserdel buscador con el que pretendía hacerse un hueco en este competitivo mercado, uno de los pocos rincones de la web en los que el gigante de Internet todavía no se había interesado.
Aunque han sido muchos los usuarios que han optado por Chrome, el buscador no ha conseguido lograr suficiente cuota de mercado para escalar a los primeros puestos, repartidos entre Microsoft Explorer y Mozilla Firefox, conformándose con disputarse el tercer puesto con Safari y Opera.
La tecnología de Google Chrome sigue siendo tan actual ahora como hace un año, y el navegador es una de las herramientas de código abierto más flexibles, rápidas, seguras y estables del momento. Está diseñado para la nueva generación de aplicaciones web 2.0 como Facebook, Twitter o las propias aplicaciones del propio Google como Gmail o Docs. Según el propio buscador, el resto de buscadores están concebidos para el uso antiguo que se hacía de la web, cuando se navegaba entre páginas estáticas.
Una de las principales novedades es que cada pestaña de Chrome funciona de forma independiente, por lo que si una de ellas se bloquea no se cae todo el navegador, sino que se cierra la pestaña en la que se estaba produciendo el proceso que ha causado el error.
Otra de las grandes diferencias entre Chrome y resto de navegadores está en el diseño. Las pestañas están colocadas sobre la barra de dirección, justo al contrario que el resto de navegadores. Tampoco incluye la línea superior de títulos, ni está lleno de botones y menús, y la propia barra de dirección sirve como cuadro de búsqueda para Google.
Tras un año desde el lanzamiento de Chrome, la tecnología de este buscador sigue siendo un puntera pero las esperanzas iniciales de que éste acabaría con el reinado de Microsoft están todavía lejos.
Durante los primeros meses el navegador de Google sólo cosechó críticas positivas y se barajó la opción de que este navegador, al igual que la mayoría de las herramientas de Google, conseguiría el beneplácito del gran público para desmarcar a Explorer y Firefox.
La realidad es bien distinta, ya que los números no dan lugar a dudas . Internet Explorer sigue con más de dos tercios del mercado, más del 60% y Firefox tiene casi el 30%. Bastante distante está Safari con un 4% y detrás Chrome y Opera con un 3% cada uno.
Recientemente Firefox ha actualizado su navegador a la versión 3.5, y Opera Software ha lanzado la versión Opera 10, una nueva edición de su browser que también ha está logrando muy buenas críticas gracias a sus novedosas características.
Safari, por su parte, ha dejado de ser una herramienta sólo para Mac OS X y existe una versión para Windows que cada vez es más popular.
Una de las deficiencias de Chrome es que sólo está disponible para usuarios de Windows, ya que la versión para Linux está todavía en fase pre-beta y no existe por el momento una para Mac OS X. Aunque podría pensarse que el porcentaje de usuarios que podría venir del mercado Linux y Apple es insignificante, lo cierto es que el perfil de usuarios de estos dos sistemas operativos es precisamente el que se interesa por un navegador de estas características.
La amenaza de Google sobre Microsoft se ha visto acrecentada con el anuncio del pasado mes de julio del desarrollo de un sistema operativo completo, Chrome OS.
Google explicó que su desarrollo del browser Chrome era sólo una parte de un proyecto mucho más ambicioso que incluía una plataforma para ordenadores basada en servicios en Internet y enfocada en la Red.
Chrome OS estará basado en Linux y estará pensado para ordenadores poco potentes y netbooks. Acer, Adobe, Asus, Freescale, HP, Lenovo, Qualcomm, Texas Instruments, y Toshiba están trabajando con Google para ayudar a “reinventar” el concepto de sistema operativo.
Por ahora se sabe poco de este enigmático sistema operativo y su objetivo está todavía poco claro, pues Google ya posee un sistema operativo ligero y óptimo para plataformas poco potentes como smartphones y netbooks, Google Android, un software inicialmente pensado para teléfonos inteligentes pero que muchos fabricantes quieren integrar en sus mini portátiles.
“Android fue diseñado desde el principio para trabajar en una variedad de dispositivos, desde teléfonos móviles, pasando por set-top boxes y hasta netbooks. Google Chrome OS ha sido creado para gente que pasa la mayor parte de su tiempo en la web, y está siendo diseñado para potenciar equipos que van desde pequeños netbooks hasta avanzados equipos de sobremesa”, ha aclarado Google. A pesar de marcar la diferencia, ha reconocido que habrá áreas en las que Chrome OS y Android se solaparán.
A pesar de no contar con un número tan elevado de usuarios como Explorer o Firefox, Chrome ha tenido efecto indudable en este mercado.
Por ejemplo, como r econocía Mitchell Baker, de la Fundación Mozilla, Chrome ha confirmado la filosofía central de Firefox de que el navegador es un pilar básico de la plataforma, no un simple componente del sistema operativo.
Tras el lanzamiento de Chrome, Firefox habilitóla opción de navegación privada, una característica que no es original de Chrome sino de la versión 2005 de Safari, pero que integraron Firefox y Explorer posteriormente a Chrome.
La navegación independiente de las ventanas ha inspirado también la opción de recuperación de ventanas cuando se cierra de golpe Firefox, una característica sugiere la posibilidad de escoger qué ventanas cerradas quiere restaurar el usuario, una característica implementada en Firefox 3.5.