La UE valora “todas las opciones” para hacer pagar impuestos a los gigantes tecnológicos

La Comisión Europea y algunos ministros de Hacienda europeos proponen implantar una base de gravamen común de sociedades (CCCTB).

La Comisión Europea está preparando una lista de opciones legales para conseguir que las multinacionales tecnológicas como Amazon, Facebook y Google paguen más impuestos, informó hoy Reuters. El documento se debatiría en la cumbre de la Unión Europea que tendrá lugar el 29 de septiembre y se publicará en el momento en que se celebre la Cumbre Digital.

Pierre Moscovici, comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Fiscalidad y Aduanas, manifestó que el documento pondrá “todas las opciones sobre la mesa”. “Creemos que la economía digital debe ser gravada como el resto de la economía. Deberían pagar su parte justa de impuestos”, aseguró Moscovici al llegar a la reunión de ministros de Finanzas de la UE que tuvo lugar en Estonia.

A principios de esta semana, un grupo de ministros de Hacienda de varios países de la UE firmaron una carta conjunta pidiendo un impuesto sobre el volumen de negocio, de cara a reformar las reglas impositivas en toda la Unión y actuar así donde las plataformas tecnológicas generan sus ingresos.

“Acojo con interés la carta enviada por algunos ministros (…) que apoyan el enfoque de la Comisión para lanzar una base de gravamen común de las sociedades (CCCTB), una base impositiva estructural”, señaló Moscovici.

El presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, por su parte, confirmó la intención del organismo ejecutivo de presentar a finales de 2018 una propuesta para establecer normas comunes sobre la fiscalidad de la economía digital. No obstante, cualquier propuesta debería ser aprobada por todos los Estados miembros de la UE y por el Parlamento Europeo antes de que pueda ser implementada.

Aquí es donde podría comenzar el conflicto. Algunos países de la UE critican el sistema actual porque permite a los gigantes tecnológicos minimizar sus cargas fiscales utilizando subsidiarias ubicadas en países con bajos impuestos, como Irlanda, Luxemburgo y Malta. En cambio, estas naciones con impuestos bajos probablemente no estén de acuerdo con este tipo de reforma tributaria digital, ya que sería perjudicial para sus propias economías.