Transferencia de configuración
En la mayoría de los casos, este proceso lo llevamos a cabo a mano, es decir, reconfiguramos la conexión a Internet del equipo, las unidades de red, correo electrónico, además de reinstalar de nuevo los programas que tengamos.
Afortunadamente, Windows XP tiene un asistente que cumple este propósito, que se encarga de supervisor transferencia de archivos y configuraciones.
Dirígete a Inicio/Programas/Accesorios/Herramientas del sistema y selecciona Asistente para transferencia de archivos y configuraciones. Es muy simple de usar y sólo consiste en crear un disco que recopile las configuraciones de tu antiguo PC para transferirlo al nuevo. Puedes escoger qué archivos y configuraciones serán transferidos, pero ten en cuenta el espacio en disco necesario para almacenar toda esta información. Si quieres transferir información como mensajes electrónicos, entonces será mejor que pienses en usar un dispositivo como un CD-R, pero si también pretendes transferir configuraciones de conexión a Internet o de red, lo más recomendable es contar con un disco duro externo, ya sea USB o Ethernet.
Este asistente también es útil si únicamente tienes un ordenador. Activarlo en el sistema regularmente te ayudará a hacer una «imagen» de tus configuraciones y archivos para que después la puedas usar en instalaciones futuras o en caso de que ocurra algún percance. Lo único que tienes que recordar es guardarla en un lugar fuera del disco duro.