El 25% del tráfico de EE.UU de 2030 provendrá de coches autónomos

La llegada de los coches sin conductor parece aún muy lejana. Aunque los fabricantes de automóviles, empresas de consumo colaborativo y compañías TIC han avanzado bastante con sus modelos y pruebas, todavía se tiene que perfeccionar sus sistemas de seguridad y adecuar la legislación y la normativa de tráfico en todo el mundo. Sin embargo, una vez que los coches autónomos lleguen a las carreteras su adopción podría ser bastante rápida.

La firma Boston Consulting Group ha publicado un estudio cuya principal conclusión es que para el año 2030 cerca de un cuarto de los kilómetros conducidos en EE.UU serán recorridos por coches eléctricos y que se conducirán solos.

La consultora cree que este tipo de vehículos se usarán como servicios de flotas que transportarán a varios pasajeros, ofreciendo a los conductores que optan por ellos hasta un 60% de ahorro en costes frente a poseer y operar sus propios coches.

BCG subraya que el gran cambio se va a producir por el incremento del interés por las tecnologías autónomas, junto con la electrificación de los vehículos. A ello se suman los numerosos problemas de contaminación que tienen las ciudades. Ahora hay más presión para encontrar soluciones alternativas de transporte para hacer el entorno urbano más sostenible y reducir los atascos de tráfico.

No obstante, los fabricantes de coches pueden estar tranquilos. La consultora predice que este cambio de paradigma no supondría una caída abrupta en la venta de automóviles, sino que lo que variará es quién adquiere y posee los vehículos.

En este escenario también continuarían proliferando las plataformas de ridesharing, como BlaBlacar. El estudio lo justifica por el argumento económico: simplemente estas opciones pueden aumentar considerablemente los ingresos para el ciudadano promedio y poderoso caballero sigue siendo Don Dinero.