Toshiba busca nueva financiación para ejecutar su plan de reestructuración
La compañía acude a los bancos para conseguir una línea de crédito por 2.500 millones de dólares.
Tras el escándalo contable que ha sacudido a Toshiba, la empresa japonesa tiene la intención de pedir una nueva línea de crédito por 300.000 millones de yenes (2.490 millones de dólares) a finales de enero para financiar la reestructuración a gran escala de su negocio, tal y como recoge Reuters.
Esta nueva línea se sumaría a otra de 400.000 millones de yenes que recibió en septiembre para ayudar a recuperarse del fiasco contable.
La compañía ha puesto sus miras en el negocio de chips y la energía nuclear, y con ello la semana pasada anunció que recortará en torno a 7.000 puestos de trabajo de su unidad de electrónica de consumo.
Estos despidos se sumarán a los anunciados previamente, con lo que en total serán más de 10.000 empleos los que suprimirá de su plantilla.
Recientemente la agencia de calificación Moody’s ha rebajado la deuda de la compañía a la categoría de basura y la Bolsa de Valores de Tokio ha colocado a Toshiba en una categoría especial a la espera de ver si la empresa puede mejorar los controles internos.
Ambos movimientos han hecho más difícil a la organización recaudar fondos a través de deuda o acciones nuevas.
“Es probable que Toshiba acuda a sus acreedores para solicitar la nueva línea de crédito”, ha afirmado un portavoz de la compañía. Por su parte, el diario japonés Nikkei ha informado que la firma busca la ayuda de los bancos, entre los que se encuentran Mizuho Bank y Sumitomo Mitsui Banking Corp.