Tiendas de aplicaciones, la pandemia del negocio de la movilidad
Sólo faltaban las operadoras para pedir una porción de la tarta. 2009 ha sido el año en que muchos fabricantes de teléfonos móviles y hasta de procesadores o netbooks han anunciado la creación de sus propias tiendas de aplicaciones, pero hasta la fecha las telecos sólo habían hecho pequeñas aproximaciones a este negocio, como Vodafone con 360.
Sin embargo, el anuncio de la GSMA durante la celebración del Mobile World Congress, deja entrever que los proveedores de servicios telefónicos y de Internet tampoco quieren saborear este dulce caramelo desenvuelto por la App Store. Los 24 miembros de la asociación (así como las cuatro operadoras nacionales aglutinadas en WAC) impulsarán la Wholesale Applications Community, una gran superficie API pensada para satisfacer a los usuarios de cualquier terminal telefónico.
¿Una muestra desinteresada por los intereses universales? ¿O una estrategia deliberada de las operadoras para llegar al mayor número de consumidores finales posibles?
Todo lleva a pensar que los grandes fabricantes Nokia, Apple, Microsoft o Google seguirán yendo por libre y mirarán con indiferencia la iniciativa. Ovi, Apple Store, Windows Marketplace o Android Market ya tienen la suficiente acogida y penetración como para retirarse de la partida individual y jugar en equipo. Sin embargo, aquellas marcas que aún aspiran a hacerse un hueco importante en el software de móviles third party no lo han dudado un momento. LG, Samsung y Sony Ericsson se ha sumado al proyecto y puede que no sean los únicos.
Si el mapa de los jugadores en el segmento de las aplicaciones móviles no estaba ya lo suficientemente enredado Alcatel-Lucent acaba de anunciar en la feria que apoyará la creación de una plataforma para que los desarrolladores puedan programar sus redes y mejorarlas. “Será un modelo diseñado para ofrecer nuevas oportunidades de ingresos para desarrolladores, proveedores de servicio y empresas”, han señalado.