El teletrabajo crece en España, pero seguimos por debajo de Europa

El teletrabajo se ha disparado en España y ya alcanza a casi tres millones de personas, un 74,2% más que hace un año. Sin embargo, aún estamos 7 puntos porcentuales por debajo de la media europea

La crisis generada por la COVID-19 ha supuesto un impulso definitivo para el teletrabajo en nuestro país. Hasta el año pasado, todavía eran pocas las organizaciones que confiaban en este modelo, convirtiendo a los empleados en víctimas de viejos prejuicios y de un modelo presencialista obsoleto.

Entonces llegó la pandemia y el trabajo remoto dejó de ser una opción para convertirse en la única posibilidad de continuar operando. Para sorpresa de muchos, la instauración del teletrabajo, no exenta de dificultades, resultó ser mucho más exitosa de lo previsto. Y muchas empresas se dieron cuenta de que la posibilidad de trabajar desde casa incrementa la productividad de su plantilla y eleva la satisfacción de sus empleados.

Ya fuera por necesidad o por convencimiento, lo cierto es que el teletrabajo se ha disparado en nuestro país, alcanzando ya a 2,8 millones de personas en el último trimestre de 2020. Son 1,2 millones más que hace apenas un año, por lo que en los últimos doce meses el trabajo remoto se ha incrementado un 74,2%, según los datos publicados por el ‘Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo’.

Cabe destacar que el número de personas ejerciendo su labor desde casa alcanzó un registro histórico en el segundo trimestre del año, con el confinamiento obligatorio, cuando se superaron los 3,5 millones de empleados trabajando en remoto.

Se trata de un crecimiento notable, pero no ha servido para equiparnos con nuestros vecinos. Aun con el repunte de este año, en España apenas teletrabaja un 14,5% de los empleados, mientras que la media europea se sitúa en el 21,5%. Además, estamos muy lejos los países líderes en trabajo a distancia, como Suecia (40,9%), Holanda (40,1%), Luxemburgo (37,5%) y Finlandia (33,5%).

Entre los mayores países de Europa, sólo Italia (9,8%) muestra una penetración menor del teletrabajo que España. Tenemos por encima de nosotros a Reino Unido (31,1%), Francia (28,3%) y Alemania (18,5%), aunque este país quedé por debajo de la media europea. Y también nos vemos superado por la vecina Portugal (20,7%).

Otro aspecto relevante en España es la desigualdad en la penetración del teletrabajo por comunidades. Ha aumentado en todas, pero en distinta medida. Por ejemplo, la Comunidad de Madrid y Cataluña presentan más del doble de teletrabajadores que hace un año, con incrementos interanuales de un 200% y un 119%, respectivamente.

La Comunidad de Madrid ha agregado más de medio millón de personas operando en remoto, hasta alcanzar los 767.200 trabajadores. Y Cataluña suma 350.000 teletrabajadores, para llegar a 645.400 individuos. Siete de cada diez nuevos trabajadores en remoto residen en estas regiones.

Además, estas dos comunidades aglutinan ya a la mitad de las personas que trabajan en remoto en nuestro país, frente al tercio que suponían hace un año. Y si añadimos Andalucía y la Comunidad Valenciana, estas cuatro regiones aportan el 70% de los teletrabajadores (60% en el ejercicio previo).

Si atendemos a la penetración del teletrabajo, destacan la Comunidad de Madrid (22,3% de los empleados), Cataluña (17,2%), Asturias (15,4%) e Islas Baleares (14,7%), todas ellas por encima de la media española.

Por el contrario, las regiones con menor implantación del teletrabajo son La Rioja (9,6% de los ocupados), Canarias (9,8%), Murcia (9,8%), Navarra (10,3%) y Castilla-La Mancha (11%). Además, las comunidades en las que menos creció esta modalidad de trabajo fueron Aragón (+9,9%), Extremadura (16,3%) y la Comunidad Valenciana (18,2%).