Un ataque de denegación de servicio se produce cuando de forma masiva se envían desde uno o varios ordenadores una cantidad de peticiones tal que consigue bloquear el servidor que maneja una página web, un servidor o como en este caso la gestión de un servicio de mensajería.
Por el momento se ignora el causante de dicho ataque que según Telegram está generando un tráfico de decenas de gigabits por segundo por lo que en la práctica impide a la gran mayoría de usuarios del servicio conectarse a los servidores desde algunos países, uno de los cuales es España, desde donde en las últimas horas resulta prácticamente imposible acceder a Telegram.
Pavel Durov, fundador de Telegram, afirma que se trata del mayor ataque de DDoS que ha visto nunca y aunque no dispone de pruebas para realizar tan categórica afirmación, sospecha que podría tratarse de una maniobra orquestada desde la competencia para atacar la popularidad de su aplicación.
Es de suponer que a lo largo de las próximas horas los informáticos de Telegram serán capaces de solventar el problema y se normalizará el acceso para los usuarios de la aplicación.
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