Telefónica se hace con eyeOS

EyeOS seguirá operando en Barcelona como una subsidiaria de Telefónica. Meses antes de la compra se rumoreaba que la startup atravesaba problemas de liquidez.

Telefónica sigue mostrando su interés por las startups. Y no solo por la labor que hace con su incubadora Wayra, sino porque la empresa de telecomunicaciones sigue incorporando firmas emergentes a su portafolio. La teleco dirigida por César Alierta ha anunciado la compra de eyeOS, la plataforma de escritorio virtual pionera. Ambas compañías venían colaborando desde 2010.

Con esta adquisición Telefónica podrá ofrecer un servicio de virtualización de escritorio (VDI) de código libre mientras refuerza la oferta actual de Telefónica de SaaS con una solución eficiente y de ajustado precio. La teleco explica la gran oportunidad de negocio de este segmento de servicios cloud.

La multinacional también explica que la compra de eyeOS también supone reforzar su estrategia en el ámbito de las soluciones de código abierto, como Firefox OS o WebRTC. En este último apartado, en 2012 Telefónica adquirió TokBox.

La cuantía de la operación no se ha hecho pública. Lo que sí se ha comunicado es que eyeOS mantendrá su sede en Barcelona como una subsidiaria independiente de la multinacional española. Su actual CEO Michael Kisfaludi, seguirá dirigiendo la startup catalana. Mientras su confundador, Pau García Milá, continuará vinculado a la innovación de la firma de manera externa.

“La adquisición de eyeOS demuestra la voluntad de una gran compañía como Telefónica por trabajar con start-ups y su carácter abierto hacia la innovación, buscando también el talento y las mejores ideas fuera de su estructura”, ha explicado el también creador de Bananity e IdeaFoster.

eyeOS fue lanzado como proyecto en agosto de 2005 por el propio García-Milá y Marc Cercos, contando el primero con tan solo 17 años. En 2006 se constituyó como empresa. La startup obtuvo en 2011 una ronda de financiación de 10 millones de euros, quedándose a las puertas de otra. El año pasado la compañía tuvo problemas de liquidez y se comenzaron a oír rumores de que un posible ERE que iba a afectar a la mitad de la cuarentena de trabajadores. Esta compra podría haber supuesto un salvavidas para el joven Pau y el resto de empleados.