Antes del 15 de enero de 2015 todas las empresas de cualquier tamaño que desarrollen transacciones comerciales online, o facturen a la Administración Pública por importes superiores a 5.000 euros, tendrán que pasarse a la nueva e-factura.
Desde Telefónica, aprovechando ese cambio que deberán implantar muchas compañías en España, han decidido ofrecer a los usuarios una solución integrada, sencilla y económica que ayude a las empresas a adaptarse a la nueva factura electrónica.
La medida también es parte de la estrategia de la compañía por desarrollar nuevos negocios digitales, y además, se espera que con la e-factura las empresas mejoren sus procesos de tiempo, coste y eficiencia a la hora de emitir y recibir facturas.
En la compañía de telecomunicaciones también señalan que otras ventajas que aporta la nueva factura electrónica se refieren a la eliminación de los gastos asociados al papel y el franqueo postal, así como la aceleración del período de cobro o la eliminación del archivo físico.
Asimismo, prometen que con las facturas electrónicas se evitan los errores de gestión manual y la minimización de incidencias en el envío y recepción de facturas, albaranes o pedidos.
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