Tecnología y digitalización, prioridad de inversión para un 40% de las pymes españolas

Las pymes españolas son optimistas al enfrentarse al nuevo año. Muchas de ellas tienen planes para avanzar en la implementación de tecnología en sus procesos.

El primer barómetro “El estado de las pequeñas y medianas empresas europeas” de Qonto, que incluye a nuestro país en su investigación, revela que 4 de cada 10 directivos nacionales aumentarán su inversión en 2024 para el desarrollo de nuevas tecnologías y digitalización. De los países analizados, sólo Italia supera esta cifra, con un 43 %. Por su parte, Alemania y Francia se clasifican más abajo, con porcentajes del 30 % y el 18 %, respectivamente.

Las empresas españolas centrarán también sus esfuerzos inversores en los departamentos de marketing y comunicación (33 %) y las ventas y adquisiciones (24 %).

Al hablar de las palancas de crecimiento que serán clave en 2024, las pymes apuntan a la innovación y la mejora de productos (32 %) y la implementación de nuevas soluciones digitales (31 %). De este modo, la tecnología será uno de sus pilares de desarrollo.

“Los resultados obtenidos en el estudio reflejan un claro interés del tejido empresarial español por la inversión en tecnología y digitalización como prioridad de cara al próximo ejercicio”, ratifica Carles Marcos, director general de Qonto en España.

“Las pymes en España son conscientes de que, para repetir unos resultados tan positivos en 2024, la eficiencia en sus procesos y reducir los trámites a la hora de gestionar sus finanzas será fundamental”, indica.

¿Y cuáles son los desafíos que enfrentarán? El 36 % de los encuestados cree que la inflación será el principal obstáculo a batir, por delante de la falta de demanda (27 %) y la escasez de financiación (24 %). En 2023 la inflación ya había sido la mayor barrera para el crecimiento, aunque con un 61 %, seguido igualmente del déficit de demanda y de financiación.

La mayoría de los directivos de pymes españolas (75 %) afirman que los resultados de 2023 superaron las expectativas fijadas. Además, para un 22 % se mantuvieron en línea con lo previsto al empezar el ejercicio.