Tecnología para todos
El móvil, cuyas posibilidades suplen las carencias de Internet, resulta un elemento básico si se pretende que la Sociedad de la Información beneficie a una amplia mayoría.
Las Nuevas Tecnologías atraviesan por dulces parajes. Si recientemente se apuntaba la fuerza impulsora de Internet como catapulta de la Sociedad de la Información, hay que destacar un valor añadido como el que supone el teléfono móvil.
Según los más entendidos, habría que aprovechar la especial disposición a la que ha llegado el terminal en nuestro país y, partiendo de esta base, ampliar unas posibilidades que parecen no tener fin. Es más, para muchos este móvil podría suplir las carencias de Internet y acercar de modo definitivo el conjunto de la era digital al ciudadano. Con red o sin ella.
Además, los mismos expertos aseguran que para paliar los efectos más dañinos que sufren estas últimas tecnologías vinculadas al ciberespacio, léase virus, correo basura, phising y tantos otros, la alternativa que se maneja es la de aunar los intereses de todos los agentes involucrados en el proceso del e-mail y profundizar en la regulación de la protección de datos.
Un dato no precisamente novedoso en sí mismo aunque si se tienen en cuenta las posturas tomadas por el Gobierno al respecto, que quiere responsabilizar de los contenidos electrónicos a los proveedores de Internet, sí sería más conveniente escuchar a todas las partes que intervienen.
Una cuestión de número pero que, en esta ocasión, englobaría a los principales responsables de una problemática que nos atañe a todos, la del acceso total a la Sociedad de la Información por parte de jóvenes y mayores, niños y adultos.