Spotahome: “No nos afectan los mismos problemas legales que Airbnb”

Uno de los segmentos del consumo colaborativo que está más vivo es el de los alojamientos P2P. Gracias a Airbnb y otras plataformas, muchos particulares están consiguiendo sacar un dinero extra alquilando sus sofás, casas, apartamentos o garajes libres. Poco a poco se empieza a especializar y surgen propuestas que cubren nichos de mercado específicos. Spotahome es una startup que apunta al de los alojamientos de larga duración.

Esta compañía fundada hace dos años por cuatro emprendedores y tan solo 3.000 euros de capital inicial quiso desde el principio enfocarse en propietarios y arrendatarios que quisieran alquilar pisos o habitaciones durante más de un mes. La usan muchos estudiantes, profesionales y personas que tienen que pasar largas temporadas en otros países o ciudades. Spotahome surgió, como ha ocurrido anteriormente con otras muchas startups, de una necesidad real que identificó uno de sus cofundadores y CEO, Alejandro Artacho.

“Yo estaba trabajando en el sector de los alojamientos de Londres y trataba siempre con propietarios. Entonces vi una oportunidad increíble porque estos perdían muchísimo tiempo en visitar a las casas, posteando en páginas de anuncios clasificados recibiendo miles de llamadas todos los días, emails… Al mismo tiempo buscar piso en Londres era una pesadilla, yendo a visitar miles de casas de un sitio a otro de esta gran ciudad y con todo el día lloviendo”, cuenta Artacho para Itespresso. “Entonces pensamos que si había modelos como Airbnb que funcionan para corto plazo y la gente reserva sin ver las casas. ¿por qué no hacemos el mismo modelo y lo llevamos al largo plazo?”.

El cofundador de Spotahome explica que para que la gente reservara seis meses o un año, entendían que debían proporcionar más información que la que ofrecían otras plataformas ‘cortoplacistas’. Así, producen imágenes detalladas, vídeos de 360 grados y visitas a los inmuebles para verificar qué tienen estos exactamente y cómo son. La idea es mostrar lo máximo posible sin que los usuarios tengan que desplazarse.

“Nosotros no publicamos si no vamos a las casas. Tenemos unos ‘runners’ que simulan una visita online y la ponen en la plataforma. Estas personas verifican que los propietarios existen primero y así nos evitamos el problema de scam. Los vídeos que hacemos son en primera persona, es como un videojuego, abres las ventanas, los armarios, etc”, cuenta el emprendedor.

En su bienio de historia, Spotahome ha pasado de cuatro trabajadores a más de setenta personas en plantilla. Ya están en seis países diferentes y doce ciudades europeas y preparando su llegada a otros mercados. Incluyen 17.000 propiedades y crecen a un ritmo de 1.000 al mes. Hasta la fecha han recaudado más de 1 millón de dólares, gracias a inversores británicos y estadounidenses especializados en ‘marketplaces’. Para monetizar le cobran una comisión al inquilino y otra al propietario en base al tiempo de alquiler y el precio.

“Estamos cerrando otra ronda y necesitamos mucha más gasolina para seguir expandiéndonos”, revela Artacho. La compañía, nacida desde el principio con vocación internacional (entre los que la forman hay 24 nacionalidades diferentes), no se cierra puertas.

La legislación y los lobbies hoteleros tampoco parecen cerrárselas. “Como nuestros alquileres son de larga duración no nos afectan los mismos problemas que Airbnb. Hay algunos sitios en que solo puedes hacer alquileres de seis meses, pero da igual porque el propietario siempre puede seleccionar cuál es el período mínimo”, apostilla el CEO de Spotahome. “en cualquier caso, nosotros solo somos un intermediario y nuestro sistema no permitiría alquileres por debajo del plazo marcado por la ley”.