Spaces: “El trabajo flexible ya es irreversible”

Spaces abrirá un enorme espacio de coworking junto al Campus de Google en Madrid en los próximos meses.

Cuentan con más de diez años de vida y están presentes en 30 países. Con esa trayectoria a sus espaldas, Spaces, una de las pioneras en el mundo del coworking, acaba de aterrizar en nuestro país. El largo recorrido de esta empresa con origen en Holanda es la prueba de que los espacios de coworking no son una moda, sino una evidencia de que la manera de concebir el trabajo ha cambiado.

Las nuevas generaciones, como los millennials, ya no quieren trabajar en una oficina con un escritorio entre cuatro paredes. Lo que quieren ahora es una nueva forma más flexible que pueda incluir el concepto de bienestar. El trabajo flexible ya es irreversible”, asegura para Itespresso Philippe Jiménez, Country Manager de Spaces en España.

La firma no solo proporciona espacios de trabajo, salas, despachos o cabinas insonorizadas e intenta favorecer el networking. Sus centros también acogen un amplio y rico programa de eventos culturales y formativos para que los coworkers aprendan y se distraigan, con actividades que van desde ponencias motivadoras a clases de yoga. Otra de las ventajas que tiene Spaces es que sus ‘miembros’ tienen la posibilidad de disfrutar de su extensa red de espacios incluso cuando viajan a otras ciudades o países por trabajo u ocio.

La compañía ha escogido algunas ubicaciones estratégicas para su llegada a nuestro país, orientándose a la comunidad tecnológica y emprendedora. “España es uno de los países vanguardistas en cuanto al mercado flexible. Hay muchísima demanda en las grandes ciudades, pero también en las ciudades pequeñas, con lo cual hay un potencial muy interesante en este mercado”, señala Jiménez. El primer centro de Spaces, de 1.500 m2 de superficie, se abrirá este verano en la capital española, justo en un edificio colindante al Campus de Google. En Barcelona se pondrá en marcha de manera paralela otro espacio en el distrito 22@.

El responsable asegura que los coworkers españoles no se diferencian demasiado de sus homólogos de otros países. “Realmente funcionamos de la misma forma. Lo que está impulsando toda esta forma de trabajar es la tecnología. Esto funciona exactamente igual, la forma de trabajar es la misma y las virtudes son las mismas: poder ser muy flexible, conciliar la vida laboral con la personal y hacer ahorros en cuanto a la inversión”, asegura el directivo.

También hemos querido saber si en estos espacios, que muchas veces se venden como idílicos para favorecer la creatividad, la colaboración y las relaciones personales, también se producen roces o tensiones entre sus asistentes. Philippe afirma que no se da el caso, porque estos centros no tienen nada que ver con la estructura habitual de las oficinas. “Los profesionales que van a coworkings van sabiendo lo que buscan, lo que quieren y van a encontrar. Saben que cohabitan en un espacio con otras empresas y si les molesta el ruido se pueden aislar o si quieren un espacio más confidencial también hay despachos. Lo que buscan es relacionarse con los demás”, destaca.  

La entrevista está disponible íntegramente en el siguiente vídeo.