Sony Ericsson factura un 42% menos que hace un año
Sony Ericsson ha dado a conocer los resultados correspondientes al tercer trimestre de su año fiscal, que muestran una importante caída, tanto en número de dispositivos vendidos, como en volumen de ingresos y beneficios.
Así, entre los meses de julio y septiembre, la compañía vendió un total de 14,1 millones de terminales móviles, un 2% más que la cifra conseguida en el trimestre anterior, aunque muy lejos de los 25,7 millones de unidades suministradas en el tercer trimestre de 2008, dato que fija la cuota de mercado de Sony Ericcson en el 5%. Ello ha provocado que el volumen de ingresos con respecto a hace un año haya descendido un 42 por ciento, situándose en los 1.619 millones de euros. Asimismo, el precio medio de venta de los terminales volvió a bajar hasta los 114 euros.
En cuanto al volumen de beneficios conseguidos a lo largo del trimestre, excluyendo gastos de reestructuración, éstos registraron una pérdida de 164 millones de euros, que si bien es casi siete veces mayor a la que obtuvo en el mismo período de 2008, muestra una ligera recuperación frente a la pérdida de 213 millones de euros del trimestre anterior. Un dato que desde la compañía se interpreta como un signo de recuperación.
“Nuestro negocio en el tercer trimestre comenzó a mostrar los efectos de nuestro programa de transformación en marcha. Después de haber renovado nuestra marca, ahora estamos mejor posicionados para apoyar el lanzamiento de nuevos productos, como Aino y Satio, en el cuarto trimestre. Hemos despejado los inventarios de canal, realineado los recursos internos y mejorado la eficiencia. También hemos dispuesto de financiación externa para fortalecer la posición financiera de la empresa”, ha asegurado Dick Komiyama, presidente saliente de Sony Ericsson. “La transformación de la empresa de cara al crecimiento futuro y al regreso a la rentabilidad de Sony Ericsson es el foco de su equipo directivo, y seguirá bajo la nueva dirección”.
En cuanto a sus pronósticos para 2009, Sony Ericsson prevé que el mercado mundial de teléfonos móviles se contraerá un 10% con respecto a los 1.190 millones de unidades suministradas en 2008, debido a la coyuntura económica mundial y a una menor demanda.