Treinta años han tenido que pasar para que el Walkman de Sony deje de ser fabricado. En una industria como la electrónica de consumo, tres décadas son toda una vida, tiempo suficiente para que hayamos visto en las vitrinas de los establecimientos especializados un buen número de nuevos dispositivos como el Discman y los reproductores de MP3.
Si Sony ha mantenido la fabricación de los primeros reproductores de música personales es porque aún tenía demanda. Claro está, no como la inicialmente experimentada, pero la tenía. Fue en 1979 cuando la compañía comenzó a comercializarlos, pero durante su primer mes tan sólo se vendieron 3.000 unidades. Sin embargo, pronto comenzó a experimentar un éxito sin precedentes, llegándose a vender 200 millones de reproductores Walkman durante estos años.
Irónicamente, el anuncio sobre esta discontinuidad de producto se produce en el noveno aniversario del iPod, el reproductor que ha marcado época en estos primeros años de siglo XXI.
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