Sólo un 5% del pensamiento del consumidor es perceptible
La mayoría de los consumidores empiezan el proceso de compra en un dispositivo y finaliza en otro, lo que supone un nuevo reto para las marcas.
La neurociencia se ha rendido al marketing para poder conocer mejor al consumidor y así poder entender sus expectativas y analizar su comportamiento en base a los canales y puntos de contacto que se mantienen con las marcas.
The Valley y Optimyzet, en colaboración, han tratado de analizar las ventajas que ofrece esta innovadora técnica poniendo el foco en el vínculo emocional del cliente y la medición de sus reacciones inconscientes.
Mónica Zapata (Directora y Responsable de Customer eXperience, Estrategia Digital e Innovación en Optimyzet) abordó, en un evento celebrado en la sede de The Valley, Barcelona, la novedosa realidad multidispositivo a la que se están enfrentando las marcas y la influencia emocional en los consumidores mediante las interacciones de los diferentes canales.
Los últimos datos recogidos destacan que el 90% de los usuarios utilizan varios dispositivos a lo largo del día, y esto influye directamente en los procesos de compra dentro del ámbito digital. De hecho, el 67% de las compras realizadas de manera online comienzan en un dispositivo y se finalizan en otro, de tal manera que se conforma una nueva realidad de consumidores multicanal que plantea nuevos retos para las marcas.
Las técnicas tradicionales de marketing solamente inciden en la respuesta verbal o explícita del cliente, abarcando un 5% de su respuesta total a los diferentes estímulos a los que se enfrenta. Pero, por su parte, el inconsciente reacciona a la parte implícita de nuestras respuestas. Y es ahí donde el neuromarketing profundiza en el 95% restante.
Dentro de este último, la experiencia del usuario se torna más relevante debido a que es ahí donde se premia la rapidez, consistencia o amabilidad de una marca en todos esos puntos de contacto durante el customer journey. El neuromarketing juega aquí un papel fundamental para descifrar la manera en la que cada usuario construye la relación con una marca en base a lo que su cerebro recibe en cada una de esas fases.
La disciplina del neuromarketing se adentra en los niveles de emoción, atención y memoria a través de las diferentes herramientas que permiten medir las reacciones no conscientes de forma cuantitativa y facilitan conocer mejor al usuario. Son diferentes las técnicas que ofrecen al usuario completar su reacción más instintiva a lo que le oferta una marca. Algunas de estas técnicas son:
- Electroencefalograma: que aportar información sobre la actividad cerebral y las emociones que se registran.
- Biométrica: que accede a la parte más afectiva de la mente.
- Pupilometría: que incide en el impacto emocional de las imágenes.
- Eye-tracking: que examina el recorrido de la mirada de los usuarios.
Todas ellas consiguen alcanzar una nueva capa de información que se basa en el análisis emocional y cognitivo que descifran lo que los usuarios llegan a sentir al interactuar con una interfaz o un producto. Dentro del contexto digital, las aplicaciones del neuromarketing son múltiples y logran abrir la puerta a la posibilidad de conocer más en profundidad a los clientes de cualquier sector, algo clave para conseguir una fidelización más notoria y mejorar los índice de conversión.