Sólo la mitad de las empresas se ha capacitado para detectar falsos positivos
Los datos que maneja RSA desvelan, entre otras cosas, que casi tres quintas partes de las compañías no modernizan sus estrategias para actuar ante problemas y que sólo el 42% dispone de soluciones forenses avanzadas.
La seguridad es una cuestión vital para usuarios de a pie. Pero, por supuesto, también para las compañías. Sobre todo si tenemos en cuenta la cantidad de información sensible con la que éstas trabajan y el prestigio que se juegan de cara a sus clientes.
Sin embargo, los datos no parecen dejarlas en muy buen lugar cuando se trata de protegerse contra problemas como las acciones de ciberdelincuencia.
Al menos así se desprende una comparativa que EMC ha hecho a través de RSA entre un informe propio y una encuesta del SBIC.
Por ejemplo, en el resultado se explica que al menos 3 de cada 10 compañías no estarían preparadas para actuar en el caso de ocurrir un incidente de seguridad. Y lo que también es llamativo: cerca de tres quintas partes no modernizan sus estrategias.
Además de esta cojera en términos de planificación, se sabe que más de la mitad de las empresas sondeadas tampoco cuenta con herramientas para hacerse con datos y disparar avisos. Y que sólo la mitad sabría detectar falsos positivos.
Otros datos que dejan un sabor negativo son, por ejemplo, el 42% de firmas con soluciones de indagación forense avanzada que se ha contabilizado y el 40% que carece de software activo para gestionar problemas.