Smishing y vishing, nuevas formas de fraude online
Al no ser unas modalidades de fraude online demasiado conocidas por el momento, los delincuentes se aprovechan de la situación, intentando hacer caer al mayor número posible de usuarios en el menor tiempo posible. Está claro que una vez que los métodos de estafa son conocidos, la probabilidad de que un usuario caiga será mucho menor.
¿En que consisten estas dos modalidades de fraude?. Pues bien, el “smishing” consiste en el envío de un mensaje corto sms a un usuario indicándole que se ha suscrito a un determinado servicio, y que de no cancelar la suscripción mediante un mensaje corto al número indicado, se le pasará a cobrar por el mismo. En el mensaje de respuesta, se le pueden demandar ciertos datos personales al usuario.
La forma de protegerse del “smishing” es bien sencilla a la vez que obvia. Si usted recibe un mensaje corto que no ha demandado, simplemente bórrelo. Ya sea una solicitud de respuesta, una melodía gratuita o el último logo de moda, lo más sencillo y seguro para su terminal es que borre el sms de la memoria del terminal o de la tarjeta SIM.
Vamos con el “vishing”. El “vishing” utiliza un mecanismo similar. El usuario recibe en esta ocasión un mensaje de correo electrónico no demandado, en el que se le solicita que llame inmediatamente a un número telefónico de una determinada empresa. Una vez que realiza la llamada y se pasa esperando los minutos de rigor en estos casos, se le solicitarán datos personales que posteriormente utilizarán sin su autorización.
La moraleja es clara, ante la recepción de mensajes sospechosos de los que no conozca su origen, simplemente bórrelos. Nadie regala nada, ni siquiera un SMS. µ