“Sitios como Rockola.fm o Spotify ayudan a cortar las descargas ilegales”
El creador de Rockola.fm, Joaquín Guzmán, asegura que la venta de música online es un negocio que crece año a año, pero afirma que no se puede pedir que sustituya a otros mercados.
– ¿Podrán descargarse canciones y comprar tonos en un futuro?
– Nosotros nunca hablamos de eso en nuestro modelo de negocio. Por varios motivos, uno porque el contenido no es nuestro, y dos porque la filosofía que tenemos es de un medio de comunicación. Ahora mismo no se pueden comprar canciones, y no lo implementaremos hasta que no venga alguien que quiera venderlas. Digamos que la verdad es que no está descartado. Pero tampoco es la panacea y una gran fuente de ingresos.
– Sin embargo en FICOD sí se defendía que el negocio de la música digital debía tender a una mayor monetización…
– El problema que tiene la venta de la música digital son las expectativas que se han puesto en ella. Es un negocio que no para de crecer, pero todos los titulares que se lanzan es que no alcanza a las ventas de CD, que no supera las expectativas…. Pero para ser un mercado nuevo, no para de crecer, el problema es que alguien quiere que eso le sustituya lo que ha sido su negocio en torno a la venta de cds.
No podemos pretender que sustituya a otro mercado. Las cosas cambian, estamos en un momento de incertidumbre donde tienen que cambiar las estructuras. No se puede comparar con otras industrias. Es un nuevo mercado con una nueva distribución.
– Pero la industria discográfica aún desconfía de Internet…
– La industria de la música miraba Internet con recelo, pero se empieza a dar cuenta de que las cosas son de otra forma. Hay modelos que si son fuentes de ingresos para la industria discográfica –como iTunes- pero hay otros modelos como Rockola que deben entender que son un nuevo medio de comunicación, como lo eran las emisoras de FM. En ellas pueden poner su fondo de catálogo y las novedades, lo deben utilizar como un medio más como se ha usado tradicionalmente la radio, tv…
Hay alguna confusión, pues algunos han visto en Rockola o Last.fm como su nueva fuente de ingresos y no es así, es su nuevo medio de difusión. Esto todavía no se ha entendido bien.
– ¿Y cómo es la relación con la SGAE?
– La relación con la SGAE es muy buena, ellos tienen una licencia establecida para un modelo como Rockola y lo entendieron perfectamente. Lo que más costó es que los dueños de las discográficas entendiesen que necesitábamos una licencia muy parecida a la que tienen los medios de comunicación. Esto es lo que más tiempo nos costo negociar.
– Pero legalmente hay que cumplir una serie de limitaciones a la hora de servir la música, ¿verdad?
– Hay dos cosas: reproducción mecánica y puesta a disposición. Esta última significa que dejas al usuario elegir una hora, para que pinche, adelante, retrase… lo que quiera y las licencias te la dan las discográficas. Pero eso no es Rockola. Nosotros lo hacemos más parecido a la radio, por eso tenemos algunas limitaciones, por ejemplo no se permite sobrepasar determinados número de saltos .