Sharp ha reducido en el último año y medio, desde que inició el proceso de regulación de empleo, a 150 trabajadores en su planta de la localidad barcelonesa de Sant Cugat del Vallés.
Los trabajadores se han visto afectados por una suspensión temporal de empleo.
La compañía ha parado además la producción durante esta semana, aunque la reanudará el próximo 21 de febrero, según explican fuentes cercanas a Europa Press.