¿Se puede implementar con garantías el voto electrónico?
Para la compañía de seguridad ESET sería posible “en un entorno muy controlado y protegido, en el que haya una proporción muy pequeña de expertos en informática”.
No son mayoría los países que han implementado el voto electrónico a día de hoy. Pero los hay. En torno a esta opción diferente para ejercer el derecho al voto surgen ciertas preguntas como si es posible votar por internet de forma segura.
A este respecto, la compañía de seguridad ESET dice que es posible “en un entorno muy controlado y protegido, en el que haya una proporción muy pequeña de expertos en informática” Pero que “no hay garantías de que todo salga a la perfección”. De hecho, parece que “la tecnología que se utiliza hoy en día no es lo suficientemente segura para votar por internet”.
Así, explica que en Estados Unidos, donde acaba de haber elecciones, un requisito para llegar a esa votación electrónica totalmente segura sería “tener un modo confiable de identificación y autenticación digital de los votantes, que son más de doscientos millones”. El caso es que, ahora mismo, no existiría “ningún sistema de identificación de carácter oficial a nivel nacional”.
Por su parte, otro país como Estonia, que ha implementado la identificación digital y celebrado comicios por internet en alguna ocasión, cuenta con la ventaja del tamaño. “Su población no alcanza ni la mitad de la de San Diego, uno de los 3.000 condados de los Estados Unidos”, dicen desde ESET. A mayores, estaríamos hablando de un país que “es la sede del Centro de Excelencia de Cooperación en Ciberdefensa de la OTAN”, lo que también jugaría a su favor.
De todos modos, aunque la seguridad total no se haya alcanzado a nivel global, los expertos señalan que “modificar el resultado de una elección mediante la manipulación digital de los procesos electorales es mucho más complicado que robar dinero de un cajero automático o hacer una compra fraudulenta por internet”. Al menos así sería en Estados Unidos, que cuenta con métodos de votación variados.
“Sería muy difícil generar resultados falsos indetectables sin que alguna entidad que tenga una gran presencia en el país lleve adelante una iniciativa masiva y coordinada para lograrlo”, insisten desde ESET, que añade que un posible hackeo electoral carecería de grandes efectos.
Si bien ciertas máquinas se pueden comprometer, esto “no significa que se pueda comprometer la elección”, sentencia la compañía, que cree que “la mayor amenaza que enfrenta la elección no es un ataque informático sino, en realidad, el miedo a que se vea amenazada”.
En Estados Unidos, por ejemplo, serían pocos los dispositivos de sufragio que se encuentran conectados en red o a internet, actuando como medida de protección en sí misma. Por otro lado, unas elecciones presidenciales se realizan de forma fragmentada, “dado que cada estado vota por separado y hay una gran cantidad de distritos electorales diferentes. Por lo tanto, no se puede utilizar un único correo electrónico para infectar, por ejemplo, todas las máquinas de Arizona y comprometer así la elección”, concluye ESET. Eso sin contar el sistema de verificaciones que existe.