Se hizo con sus móviles: ahora quiere hacerse con sus hijos
Rovio ha conseguido con Angry Birds, un juego en el que unos pájaros vengadores asaltan a los cerdos malvados que han robado sus huevos, un megaéxito mundial, tanto que los pájaros enfadados y sus archienemigos porcinos han dado el salto a prácticamente todos los terrenos.
La propia firma reconocía hace unos meses que facturaba 23,98 millones de dólares únicamente en peluches de los personajes de sus juegos y la línea de productos asociados a la marca que han ido surgiendo no han parado de crecer, desde películas hasta libros de cocina. Cada mes se venden 7 millones de peluches de Angry Birds y la compañía ha decidido entrar en un nuevo mercado para seguir sacando tajada a la imagen de sus pájaros enfadados.
Rovio se va a lanzar a por el mercado de productos para el bebé, un segmento muy atractivo desde el punto de vista de las ventas. Rovio tendrá ahora dentro de su línea de productos Angry Birds mantas y ropa para bebé.
“El corazón del negocio de Rovio son los juegos pero las licencias y el merchandising son una de las partes de más rápido crecimiento de la compañía“, explica a Reuters Ville Heijari, vicepresidente de desarrollo de franquicia.