Se diluye la frontera entre el hombre y la máquina [Infografía]
¿Ciencia-ficción? Parece que no. Con el avance del Internet de las cosas, los actuales dispositivos de mano serán sustituidos por terminales insertados en, sobre o dentro de nuestro propio cuerpo, lo que creará un sentimiento de empatía entre el hombre y las máquinas.
El cuerpo humano será el centro del Internet de las cosas. A esa conclusión llega un informe elaborado por el Instituto VINT, laboratorio de tendencias de Sogeti, tras prever que los dispositivos de mano estarán insertados en nuestro cuerpo y recibirán y emitirán información.
Denominado Emphatic things, el estudio subraya que la nueva forma de conectarse hará que nuestra relación con los objetos sea más personal e íntima. “Con el aumento de la empatía con los objetos, los límites entre el hombre y la máquina se difuminan. La vida se hace más fácil, los sentidos se agudizan e incluso se crean otros nuevos, explica Menno van Doorn, director de VINT.
Además, para entender mejor este avance, la investigación establece seis categorías de dispositivos, a los que bautizan como “cosas empáticas”, que conectarán el cuerpo humano con las cosas a través de internet.
Definidas en función del lugar que ocupan en nuestro cuerpo (en, sobre o alrededor) y del tipo de información que reciben y producen, la seis categorías están conformadas por: dispositivos wearables, adjuntos a la piel, proporcionan una visión en datos corporales tales como el ritmo cardiaco; augmentables, complementan los sentidos con datos procedentes del entorno del usuario; surroundables, combinan datos del cuerpo del ser humano con información externa; enchantables, objetos cotidianos equipados con tecnología inteligente; swallowables, convierten los datos del cuerpo en un identificador digital; y biohackables, implantados bajo la piel para mejorar el desarrollo humano.
Los autores reconocen que habrá un gran número de lanzamientos fallidos en el mercado y que el potencial tecnológico, el atractivo social y la viabilidad económica determinarán si la tecnología denominada íntima o personal se integra en nuestro universo cotidiano. Sin olvidar que la nueva tecnología posibilita la comprensión de la situación y la mentalidad personal del cliente.