Muchos lo consideraban un paso atrás en la historia de las consolas de juegos, pero finalmente se ha corregido la decisión que habían tomado inicialmenteen Microsoft.
Xbox One no deberá conectarse a Internet al menos una vez cada 24 horas como medida para evitar la piratería, algo que incluso habría desactivado la opción de poder jugar sin estar conectado a menos que se cumpliera este requisito. Queda el consuelo también de que finalmente tampoco existirá la férrea protección contra los juegos usados (alquilados, comprados de segunda mano, prestados por un amigo…) inicialmente anunciada, literalmente el comunicado de Microsoft habla de que “no habrá limitaciones al hecho de compartir juegos”, algo que evidentemente no podrá suceder con los títulos que los usuarios descarguen desde Internet, según ha anunciado Don Mattrick desde la empresa fundada por Bill Gates.
Ahora bastará con una configuración inicial de la consola y a partir de ese momento podrá jugarse con ella sin tener que volver a conectarla a la Red. Por último una alegría más: desaparecen los bloqueos por región. Ya no habrá problemas con videojuegos procedentes de Asia o Estados Unidos en las consolas europeas (y viceversa).
vINQulo
Qlik detalla las ventajas de las soluciones que están basadas en la inteligencia artificial predictiva…
El uso de la inteligencia artificial, la escasez de talento y el impacto de la…
La compañía de seguridad ESET publica sus predicciones para 2025, en medio de la "innovación…
La aplicación de confianza con la que más se entrometen los ciberdelincuentes es el Protocolo…
Un estudio de IFS, Boom e IDC revela que solamente un 19 % de las…
Para garantizar la privacidad, el 30 % se ha pasado a otra compañía durante el…