Se acaba la aventura de Transmeta
La transacción está valorada en 255 millones de dólares y termina con la empresa de Silicon Valley creada en 1995 y que intentó competir con Intel y AMD en el mercado de procesadores móviles y de bajo consumo.
Sus mayores hitos fueron la contratación como ingeniero de software de Linus Torvalds (más parece como marketing que como activo profesional), y la comercialización en el año 2000 del microprocesador Crusoe, un compatible x86 de bajo consumo y menor disipación de calor que micros trabajando a la misma frecuencia y que llegó a motorizar a dispositivos de Compaq, Fujitsu o NEC.
Sin embargo, nunca supuso un desafío para los gigantes del chip y cuatro años después su producción fue detenida. Tras varios intentos de inversiones varias que paliaran sus graves dificultades financieras finalmente sólo quedaba su venta o desaparición. A ello contribuyó de manera efectiva la contratación por Intel del CEO de Transmeta.
Quedan varios acuerdos de licencia con AMD y NVIDIA que aprovecharán algunas de sus ideas y su tecnología principal que se integrará con la de Novafora en el desarrollo de una serie de procesadores de video digital.
vINQulos