Robar la identidad de una persona cuesta menos de 300 euros

Aprovechando la celebración del Día de Internet, la empresa CPP reflexiona sobre las ventajas de que aporta la red de redes, pero también sobre los peligros que esconde.

El mercado negro de datos personales es una de las industrias más rentables del crimen organizado. Al menos es lo que asegura CPP Protección y Servicios de Asistencia, una empresa centrada en la protección de identidad, que aprovechando la celebración del Día de Internet, advierte que con los datos robados se pueden abrir cuentas bancarias, solicitar tarjetas de crédito, contratar líneas telefónicas e incluso pedir créditos o financiación a nombre de la víctima. “Queremos prevenir a la población para que tengan en cuenta que los datos personales son muy importantes”, apuntan desde CPP, que ha invitado a Chema Alonso, consultor de seguridad, a que demuestre lo fácil y rentable que resulta robar identidades en Internet.

El especialista en hacking ético ha hablado sobre la evolución de internet, de cómo los creadores de virus han pasado de buscar la fama a buscar dinero, y ha asegurado que “el malware no quiere molestar, quiere ser tu amigo”, de forma que no se detecte y pueda seguir operando.

Chema Alonso también ha explicado cómo se cuela el malware en un sistema y junto con los Fallos Día Cero, que es “un fallo de seguridad para el que no hay solución”, el usuario tendrá que estar al tanto de tener el software actualizado, de contar con contraseñas fuertes, de no ser confiado y contar con un programa de seguridad, porque “la mayor vulnerabilidad es la que existe entre el teclado y la silla”, es decir el propio usuario.

El experto en seguridad también ha hecho referencia a la “confianza” de los usuarios de Mac, que creen que no hay virus para el sistema operativo de Apple. “Ya no tienes que ir una página porno para que te infecten, tienes que ir a Apple”, aseguraba Alonso, recordando los dos fallos de seguridad en iTunes –el pasado mes de agosto y en abril, que produjo la descarga de malware a los usuarios que visitaron dicha página y asegurando que en 2010 se detectaron nada menos que 60 vulnerabilidades en iOS.

Un estudio de CPP España puso de manifiesto que el 57% de la población reconoce que ha revelado alguna vez información personal a desconocidos, como nombres y apellidos (45,02%), la dirección postal (25,9%), fecha de nacimiento (23,4%), o el número de DNI (21,9%), e incluso datos bancarios confidenciales (6,5%).

Por otra parte, según la Europol el acceso a internet de alta velocidad y otros desarrollos tecnológicos han incrementado las oportunidades para este tipo de estafadores. A futuro, el acceso a Internet móvil conllevará un aumento de la vulnerabilidad ya que las víctimas potenciales estarán más tiempo conectadas.

Actualmente robar la identidad de una persona cuesta una media de 288 euros. A través de Internet cualquier puede adquirir una identidad falsa comprando un carnet de conducir (46€), un permiso de la trabajo para la Unión Europea (11€) o paquetes que incluyen extractos bancarios y facturas de agua, luz y gas (148€).