Récord de ganancias de Intel en el tercer trimestre
Los resultados del tercer trimestre del año que anunció ayer Intel son impresionantes, muy por encima de las estimaciones previstas. Las ganancias totales de la compañía tienen una subida del 15 por ciento, lo que supone 10.1000 millones de dólares (7.113 millones de euros), mientras los ingresos operativos ascienden un 64 por ciento, situándose en los 2.200 millones de dólares (1.549 millones de euros), y los ingresos netos alcanzan un 43 por ciento más, llegando a los 1.900 millones de dólares (1.338 millones de euros).
La clave ha sido un portfolio de productos amplio y atractivo. Mientras los procesadores de la compañía han marcado un nuevo récord de ventas en este periodo, el precio medio de los mismos se ha mantenido relativamente estable, lo que ha permitido una considerable subida en los ingresos. Sólo en tres meses la compañía ha vendido dos millones de procesadores Quad Core.
Paul Otellini, presidente y CEO de Intel citado por Daily Tech, cree que “la combinación de grandes productos, una demanda fuerte y creciente en todo el mundo y la eficacia operativa de nuestros esfuerzos de reestructuración actuales ha llevado a unas ganancias récord en el Q3 y a un incremento de año en año del 64 por ciento en ingresos operativos”.
El presidente de Intel, además de mostrar su satisfacción por los resultados obtenidos, espera que esta tendencia se mantenga en el último cuarto del año, pues cada uno de los elementos implicados en el éxito continuará mejorando. Se espera, de hecho, que las ganancias generales del último trimestre se sitúen entre 10.500 y 11.100 millones de dólares (entre 7.395 y 7.818 millones de euros).
Estas perspectivas económicas parecen ratificadas por los siguientes lanzam ientos de la compañía. El 12 de noviembre se lanzará su nuevo procesador Penryn de 45 nanómetros, destinado a equipos de sobremesa y servidores. Y en 2008 saldrá la plataforma de 45 nanómetros Menlow, así como procesadores basados en Penryn para portátiles. Por si fuera poco, Intel continúa con su política de recorte de personal, anunciada en septiembre, con la que espera reducir en un 10 por ciento su plantilla en todo el mundo.