¿Qué tendrá Steve Jobs?
La salud de Steve Jobs es un asunto más a tener en cuenta en los resultados de la compañía. Apple no ha ofrecido datos sobre la enfermedad que afecta esta vez a su consejero delegado, lo que ha disparado todos los rumores.
Steve Jobs ha pedido respeto a su vida privada y a la de su familia, aunque es poco probable que las especulaciones sobre qué mal afecta al CEO acaben de aquí a pocos días. El historial sanitario de Steve Jobs ha sido complicado durante los últimos años: el directivo ha sobrevivido a un cáncer de páncreas y a un transplante de hígado, convirtiéndose así en un ejemplo de superación.
La decisión de dejar a Tim Cook las funciones de CEO en funciones (Jobs sigue siendo el CEO nominal, pero Cook hará el trabajo sucio mientras el consejero delegado está de baja médica) hacen pensar que la enfermedad es grave. Las experiencias anteriores no ayudan a generar confianza. Mientras Jobs estaba sometiéndose a un transplante de hígado, la versión oficial de la compañía pasaba por señalar que sufría un transtorno hormonal sin grandes consecuencias. La baja médica de ahora preocupa, por tanto y mucho, a los inversores.
Los medios estadounidenses se han lanzado a la especulación médica. ¿Qué es lo que sufre ahora Steve Jobs? Según Bloomberg, la baja está causada por un nuevo episodio del cáncer de páncreas que sufrió hace unos años. El directivo ha, desgraciadamente, recaído: el transplante habría sido un intento de frenar el cáncer y la pérdida de peso un síntoma de que algo iba mal.
Para The Wall Street Journal, Steve Jobs habría sobrevivido a la muy complicada operación llamada de Whipple, un proceso que elimina parte de varios órganos para frenar el avance del cáncer. El transplante de hígado habría sido un movimiento más para intentar frenar el cáncer y el tratamiento con inmunosupresores para evitar que el organismo de Jobs rechazase el órgano el causante de infecciones que han lastrado la salud del CEO.
La posibilidad de una nueva recaída en el cáncer que afectó hace unos años a Jobs es por tanto muy elevada. La posibilidad de que se respete la petición del directivo a que no se sepa nada… ya no lo es tanto.