¿Qué piden las empresas a su community manager?

La de community manager es una de las profesiones del sector de las nuevas tecnologías más modernas, más recientes y más difusas. ¿Qué hay que ser para realizar esta función? ¿Qué hace exactamente un CM? ¿Y cuánto hay que pagarle a un empleado que realiza esta función? Las empresas no lo tienen nada claro, los empleados tampoco (las redes sociales quemaron en la pira del trending topic a una empresa que decidió lanzar el ‘carné de community manager’) y las ofertas para encontrar al community manager perfecto son de lo más diversas y dispares.

Que mejor para saber qué se pide a un CM que ir allí donde las compañías los buscan: para establecer el perfil del community manager perfecto, hemos hecho un pequeño estudio de mercado en uno de los portales de empleo más populares de España.  Y las conclusiones son dispersas.

Para empezar, a un community manager se le piden demasiadas cosas. No sólo tendrá que entender cómo funcionan las redes sociales, ser proactivo a la hora de entender a los usuarios y responder a sus dudas, preguntas y problemas y generar viralidad para la marca (lo que al fin al cabo se espera de un CM) sino que además tendrá que saber idiomas (a cuanto más extraño mejor), saber de SEO y de SEM, escribir para blogs corporativos y hasta instalar Windows en los ordenadores de la oficina.

Varias son las empresas que piden que sus futuros community managers tengan un ciclo medio de Informática. En una oferta (15.000 a 18.000 euros brutos al año, tres años de experiencia) podemos leer que el CM será también el responsable de mantener los equipos informáticos de la empresa. Otra pide conocimientos de “programación web, flash y temas de diseño”, aunque deja claro desde el primer momento que el community manager será además gestor informático y eleva su salario (ofrecen entre 1.500 euros y 2.700 euros brutos al mes).

En la lista de ofertas que se puede encontrar en el portal de empleo no es una sola la que pide únicamente el bachillerato y prefiere encontrar a un “amante de las redes sociales”. Aún así, lo habitual es que al CM se le pida una formación en comunicación o en marketing, por lo que se da por hecho que será bueno redactando y realizando acciones de branding, publicidad y posicionamiento de la marca. También es habitual reclamar un alto nivel de inglés (salvo el bilingüismo español-inglés, que se paga en una oferta a entre 48.000 y 60.000 euros, los conocimientos de la lengua de Shakespeare no aportan una excesiva subida de sueldo). El catalán, en las ofertas en Cataluña, es también obligado.

Otros idiomas, como el francés, empiezan a aparecer en las ofertas como un plus a valorar y se reclaman también perfiles muy especializados, como CM bilingües en lenguas más exóticas que el inglés aunque no tan bien pagadas (12.000 a 18.000 euros al año, una de esas ofertas).

“Hace unos años había que tener una web, ahora hay que tener Facebook”, nos explica una community manager que prefiere permanecer en el anonimato y que se muestra bastante desencantada con la profesión, tras escuchar repetidas hasta la saciedad en congresos, cursos y similares los discursos sobre la empatía, la cercanía y la importancia del CM. “En realidad ser CM es ser publicista pero en redes sociales”, asegura tras años de profesión, concluyendo que con eso y usando el sentido común ya está hecho.