Predicción y prescripción, más allá de la IA generativa
Qlik detalla las ventajas de las soluciones que están basadas en la inteligencia artificial predictiva y la inteligencia artificial prescriptiva.
La tecnología de inteligencia artificial (IA) se ha puesto de moda y traspasa barreras, alcanzando a empresas de distintas áreas geográficas, tamaños e industrias.
Sobre todo, lo que se ha extendido es la IA generativa, que permite crear nuevos contenidos en base a patrones aprendidos a partir de los datos, incluyendo los grandes modelos de lenguaje con soluciones como ChatGPT. Esto convierte a la IA generativa en una solución útil, por ejemplo, para diseñar productos.
Pero no es el único tipo de IA que existe. Hay otros dos grandes tipos de soluciones, la IA predictiva y la IA prescriptiva.
Así lo identifica Qlik, que advierte que “cada tipología de inteligencia artificial aporta capacidades únicas y complementarias que, bien implementadas, pueden suponer un antes y un después en la forma de operar de las compañías”.
Por ello, recomienda realizar un análisis de las necesidades empresariales que ayude a eligir la herramienta más apropiada y permita exprimir su potencial.
La IA predictiva se caracteriza por su capacidad para anticipar eventos y prever resultados conforme a lo que marcan los datos históricos. En la práctica esto facilita la reducción del riesgo.
Es un tipo de inteligencia artificial que transforma “problemáticas en preguntas en las que se necesite clasificar datos, por lo que se traduce en aplicaciones para detectar fraude financiero, predicción de demanda en ventas o mantenimiento predictivo para maquinaria en el sector industrial, entre otras”, detalla Qlik.
Por su parte, la IA prescriptiva coloca a las empresas en la senda a seguir. Parte del análisis predictivo y la simulación de varios escenarios para tomar decisiones informadas y recomendar acciones fieles a los objetivos de negocio.
El aprovechamiento práctico de este tipo de IA tiene que ver con cuestiones como la gestión de inventario en tiempo real o la optimización de la ruta de transporte.