Portugal Telecom contrataca: lanzará a Telefónica su propia oferta por Vivo
Portugal Telecom podría poner la puntilla a la ofensiva y contaofensiva protagonizada por y con Telefónica por el control de su joint venture brasileña. La compañía lusa podría lanzar su propia oferta por la totalidad de Vivo a la española, para sacarla así de la operadora.
“Puedo asegurarte que hay gente interesada en Oriente Próximo y Asia“, apunta a Bloomberg uno de los responsables del Banco Espiritu Santo, uno de los principales accionistas de Portugal Telecom, José Maria Espirito Santo Ricciardi.
La lusa se pondría así al mismo nivel que Telefónica en la batalla, aunque igualar la cantidad ofrecida (que lanzó una oferta de 5.700 millones de euros por el 50%) requerirá una apuesta elevada.
Los analistas apuntan a Bloomberg que quizás Portugal Telecom debería dejar escapar a Vivo y centrarse en una nueva operadora, como Oi.
Y siempre queda preocuparse también por apagar el otro foco del incendio: la posible OPA hostil de Telefónica por PT. Los rumores que posicionaban a Carlos Slim, el magnate mexicano de América Móvil a punto de caramelo para entrar en el capital de Portugal Telecom (y frenar así las aspiraciones de Telefónica en un continente que es su mercado), se han quedado en nada.
“No hay conversaciones con la gente de Portugal Telecom”, reconocía a Reuters el asesor de Slim, Arturo Elías Ayub.
Poderes públicos
Mientras, la política empieza a salpicar el proceso. Portugal cuenta con una golden share, una acción de oro con la que frenar cualquier compra que perjudique al país, en Portugal Telecom. Por ahora, la administración lusa ha dejado claro que no se ha planteado todavía si debería usarla llegado el momento.
El primer ministro portugués, José Socrates, se reafirmó, como recoge Reuters, en que la contienda Portugal Telecom-Telefónica tendrán que arreglarla las dos operadoras, sin que el gobierno luso intervenga.
Por su parte, Brasil no se implicará en las negociaciones. “Eso es un problema de mercado, no un problema del Gobierno”, apunta una fuente de la administración a Reuters. “Simplemente no tenemos una posición”