Por qué todos quieren comprar a Yahoo
Las cifras de la firma de internet caen en picado, pero Google, Verizon y Time, entre otros, quieren comprarla.
Lo que llevaba años rumoreándose por fin parece una realidad aceptada por todos: Yahoo está a la venta. Ya nadie espera que Marissa Mayer, CEO de la compañía, haga el milagro que se le pedía y logre darle la vuelta a un negocio que se hunde. A estas alturas lo mejor que puede hacer la ex de Google es vender bien Yahoo, cerrar su etapa ahí y avanzar hacia nuevos retos que no impliquen rescatar a un Titanic.
¿Qué ofrece Yahoo a sus potenciales compradores? Desde luego, no un negocio boyante en expansión. Ni siquiera un negocio en crisis, pero con brotes verdes. Esta semana en Re/Code analizaron los libros confidenciales que los banqueros de Yahoo han puesto a la disposición de los interesados en hacerse con la firma para que puedan calcular mejor su oferta, y los números son de todo menos bonitos. Lo que se entiende -porque parece ser que hay información confusa y cifras que no aparecen -es mucho peor de lo esperado.
Según las estimaciones de Yahoo, en 2016 los ingresos de la compañía caerán un 15% y los beneficios un 20%. Eso significa pasar de ingresos de 4.400 millones de dólares en 2014 y 4.100 miillones en 2015 a 3.500 millones este año; en cuanto a los beneficios, pasarían de 1.400 millones en 2014 y algo menos de 1.000 millones en 2015 a 750 millones en 2016.
¿Hay razón para la esperanza? ¿Algo que apunte a que Yahoo va a volver a crecer? La respuesta parece un rotundo no. Comprar un gigante en este estado podría ser visto como una especie de suicidio o ganas de hacerse con problemas y quebraderos de cabeza, pero los interesados, entre los que se encuentran Google, Verizon y Time, ven algo distinto. Más allá de las cifras se quedan con el hecho de que Yahoo sigue siendo la tercera mayor compañía de medios de Estados Unidos y con los números de visitas que todavía tiene: 202,5 millones de visitantes únicos en noviembre, por ejemplo. Más que Wikipedia.
Qué ve Google en Yahoo (y por qué podría ser un problema)
¿Qué podría aportar a Google hacerse con Yahoo? La respuesta es sencilla: además de deshacerse de un rival menor, podría aprovecharse del negocio de publicidad de la firma de Marissa Mayer, aplicarle su fórmula mágica, y multiplicar sus ganancias en este mercado. Al fin y al cabo, uno de los mayores problemas que parecen tener en Yahoo a la hora de impulsar su negocio de publicidad online es el no saber cómo extraer y monitorizar los datos que ya tienen (sus anuncios, de hecho, son mucho menos segmentados que los de Google o Facebook).
Por supuesto, a la firma de Mountain View también le crearía algunos problemas extra hacerse con Yahoo, ya que es fácil ver cómo la operación podría hacer saltar las alarmas de todas las autoridades anti-monopolio. De hecho, ya en 2008 ambas compañías tuvieron que abandonar un acuerdo conjunto que tenían en materia de publicidad ya que el Departamento de Justicia de Estados Unidos amenazó con llevarlas a juicio.
¿Qué buscarían, por su parte, Verizon y Time al hacerse con Yahoo? Ambas irían a por su negocio de contenidos (justo lo que interesaría menos en Google). Verizon ya se hizo con AOL.com el año pasado y este sería un paso más en esa misma tendencia, la que lleva a proveedores de Internet y móvil a darse cuenta de que tienen que ofrecer también algo más: contenidos propios y servicios especiales. Además, así se recogen datos de los suscriptores que se pueden utilizar para la publicidad. Time se aprovecharía de la audiencia de Yahoo para intentar meterse en el Top 10 de sitios web más grandes de Estados Unidos.
Yahoo es un gigante derribado, pero gigante al fin y al cabo. En manos de una compañía que sepa aprovechar sus recursos, tecnología, servicios y personal, podría ser una compra muy interesante. Y hacerse con alguien así de grande al precio seguramente bajo al que se va a vender parece una oportunidad demasiado buena como para dejarla pasar.